Oración de protección: reza a San Pablo apóstol para alejarte de cualquier mal o demonio

Cada 18 de noviembre se celebra la dedicación de las Básilicas de San Pedro y San Pablo, en las cuales se encuentran resguardados los restos de estos dos apóstoles, por ende, en esta fecha puedes aprovechar para dedicar plegarias a dichos santos; no obstante, puedes dirigirte a ellos en cualquier otra oportunidad.

El apóstol San Pablo, también conocido como Saulo de Tarso o San Pablo de Tarso, comenzó persiguiendo a aquellos que hablaban de Jesús, sin embargo, toda su vida cambió cuando vio una luz y escuchó la voz de Cristo, preguntándole por qué lo perseguía; además, luego de quedar ciego Ananás, un discípulo de Jesús lo ayudó a recobrar la vista poniendo sus manos sobre sus ojos, en nombre del Espíritu Santo.

Se convirtió en uno de los más fieles seguidores de Jesús y en un gran propagador de la Palabra, motivo por el cual a él puedes encomendarte hoy en día para pedir ayuda en tus problemas; hoy, precisamente, te enseñamos una oración, compartida por el portal ‘Fieles a Dios’, para pedirle protección frente a cualquier mal o demonio.

Oración para estar protegido de males y demonios

San Pablo de tarso, maestro multiplicador de sapiencia, ilustre conocedor de mi fe, a ti acudo por sabiduría en un laberinto con paredes hechas de maldad, necesito guía. Sé mi pastor, hazme seguir las enseñanzas de nuestro Señor, permíteme conocer la voluntad del todopoderoso; estoy seguro de que siguiendo los pasos de Cristo nada me ofuscará.

Muchos son los demonios que hoy veo, tal vez disfrazados de problemas, observo hambre, guerras y miserias; necesito que me cubras con un manto, procuro que con esta oración se me bendiga, temo ser arrastrado hacia el mal. No permitas que mi juicio se nuble, hazme siempre un fiel cristiano, no permitas que atente contra mi propia fe, no dejes que ningún demonio me manipule.

Estoy seguro de mis creencias y mis devociones, pero como todo ser humano me hallo inmerso en una oscuridad que sólo puede ser superada siguiendo al Señor. Hablo con mi consciencia y a veces siento desfallecer, siento que puedo sucumbir ante lo maligno, sin embargo aquí estoy, con esperanza y amor por el cielo, pidiendo protección, porque soy capaz de hacer la voluntad divina, incluso con mis ojos cerrados.

San Pablo, hoy y siempre seré tu humilde aprendiz, me dejaré llevar por tus revelaciones, nada puede estar mal si está encaminado por nuestro Padre. Además de todo lo que ya he pedido, me resulta de mucha importancia aseverar que aún hay muchas cosas que debo aprender.

Más allá de la biblia, hay relatos muy poco conocidos pero con enseñanzas con las que me puedo guiar para saber cómo actuar. Intercede ante mí para que, a través de pensamientos, visiones o sueños, hagan presencia muchos sucesos, los cuales me permitan conocer los peligros, aquellos a los que me podría enfrentar.

Ya que deposito mi ser en tus manos, San pablo, deposito asimismo mi pensamiento, mi razón y mi alma, para que seas quien me lleve a través de todo peligro y todo mal. Doy mil gracias por tu apoyo y espero siempre estar bajo tu cuidado. Amén.