Por: Redacción Vida y Estilo • Colombia.com

Oración a San Ignacio de Loyola para alejar personas de tu vida

Ponte en manos del Santo Patrono San Ignacio de Loyola para hacerte invisible ante las personas malintencionadas.

Actualización
San Ignacio de Loyola puede ayudarte a alejar personas de tu vida. Foto: Shutterstock
San Ignacio de Loyola puede ayudarte a alejar personas de tu vida. Foto: Shutterstock

Ponte en manos del Santo Patrono San Ignacio de Loyola para hacerte invisible ante las personas malintencionadas.

En el camino de la vida te encontrarás con todo tipo de personas, unas que te aportarán algo positivo y siempre estarán dispuestas a ayudarte, algunas para las cuales serás completamente invisible, pero también otras que solo querrán hacerte el mal, pues guardan una gran cantidad de rencor y envidia en sus corazones.

De hecho, puede que en este momento estés rodeado de estos desagradables sujetos sin haberlo notado pues, si bien es cierto que algunos se pueden reconocer al no esconder jamás sus acciones o forma de ser, hay una gran parte de ellos que se camuflan entre tus amigos e, incluso tus familiares, pero solo se trata de ‘un lobo vestido de oveja’.

Para protegerte ante este tipo de mal, puedes ponerte en manos de San Ignacio de Loyola, el Santo Patrono fundador de los Jesuita y quien en su pasada por el mundo terrenal siempre intentó encontrar todo tipo de soluciones a partir de su fe en Dios. Con una sencilla oración puedes impedir que las malas personas te hagan daño, brindándote la protección que necesitas al interceder por ti con el Señor.

Tus enemigos pueden estar camuflados dentro de tus amigos o familiares. Foto: Pixabay
Tus enemigos pueden estar camuflados dentro de tus amigos o familiares. Foto: Pixabay

Oración para alejar personas

Querido San Ignacio de Loyola, acudo a ti por tu poderosa intercesión. Mis enemigos se han multiplicado, y son muchos los que actualmente me rodean. La mala intención está en cada esquina; mis amistades, en mi trabajo y a veces hasta en mi familia se han llenado de malas intenciones.

Dice en las santas escrituras, en el libro a los Efesios, que la lucha no es contra carne y sangre, no es contra personas, es contra ejércitos y potestades, contra principados en las regiones celestes. San Ignacio, quiero implorarte que me des las fuerzas necesarias para continuar; por eso, mi lucha es en los espiritual, con lo que opera detrás de esas personas sembrándoles pensamientos.

En la sensatez pido alumbramiento y sabiduría divina para estar seguro de cada paso que doy en mi camino. Así trabaja el enemigo, creando pensamientos e ideas sugestivamente, sutilmente. Pero no lo dejaré, porque los pisaré como el Arcángel San Gabriel algún día lo hizo, con la misma fuerza y voluntad.

Debes dejar de lado todas aquellas personas que le resten a tu vida. Foto: Pixabay
Debes dejar de lado todas aquellas personas que le resten a tu vida. Foto: Pixabay

Por eso, yo ahora me revisto de la autoridad que se me ha sido conferida como hijo (a) de Dios. Impongo en el nombre de Jesús que todo espíritu de maldad en contra mía, se detenga. Cualquier espíritu de envidia, todo espíritu de chisme, todo espíritu de murmuración en contra mía, se silencia ahora. La mala intención que se haya levantado contra mí, es desarticulada de inmediato.

En caso de que vaya en contra de mis finanzas, quien me quiera robar, quien me quiera estafar, se sujeta en este momento. Si el enemigo viene por un camino a hacerme daño, por siete huirá avergonzado. Toda lengua viperina, maliciosa, infructuosa, toda lengua que me quiera estancar, enmudece actualmente.

Todo plan que quiera acabar con mi reputación, mis planes y proyectos, es desarticulado en el nombre de Jesús. ¡Me declaro libre!, me blindo con la sangre del cordero de toda acechanza del enemigo. En el poderosísimo nombre de Jesús, nombre sobretodo dado aquí en la tierra, por los siglos de los siglos. Amén.