Si no quieres pelear con tu pareja, ponle atención a estas claves
Las relaciones de pareja no una eterna luna de miel, la cotidianidad y la rutina o la simple convivencia hacen que ese color rosa de un principio se destiña pero de nosotros depende que se mantenga vivo.
Las relaciones de pareja no una eterna luna de miel, la cotidianidad y la rutina o la simple convivencia hacen que ese color rosa de un principio se destiña pero de nosotros depende que se mantenga vivo.
Cuando los roces se presentan, hay que aprender a sortearlos de buena forma para evitar que se conviertan en grandes problemas que al final resulten irreconciliables, por eso hay que estar muy despierto y ponerle mucho cuidado a estas recomendaciones, que de practicarse permanentemente, mantendrán la buena salud de la relación.
No te calles
No hablar y no manifestar lo que se piensa es un grave error, porque hace que se tienda a crear mentiras, siempre manifiesta tu incomodidad o tu aprobación frente a cualquier tema pero siempre hazlo de manera agradable y respetuosa.
Apégate a la verdad
No mientas ni te mientas, debes ser realista y entender que las discusiones, desacuerdos y disgustos siempre van a estar presentes, no hay relaciones perfectas y a veces pequeños disgustos van convirtiéndose en frustraciones.
Reclama sin agresividad
Debes evitar maltratar a tu pareja con reproches exagerados, eso hace que ante ese nivel de agresividad, quien cometió una falta crea que no es tan grave. Hay que aprender a reclamar con una autoridad que se respete.
No revuelva peras con manzanas
Si vas a discutir sobre un asunto, céntrate en solo ese asunto porque cuando le agregas otro, se corre el riesgo de desconcentrarte en lo realmente importante y finalmente no solucionar nada.
Aprende a dialogar
Por más molestos que se encuentren es importante discutir con cariño y no dejarse exaltar, el diálogo es la clave del éxito, fortalece el vínculo y evita la violencia.
Controla el humor
La ironía y la ridiculez no ayudan en absoluto, el humor debe saberse usar y en momentos de tensión no ayuda mucho porque da a entender poco compromiso frente a los temas importantes. La risa es siempre buena pero no todo el tiempo, no confundas humor con payasada.
Perdona y pide perdón
Si ofendes o te equivocas, pide perdón y si te piden perdón, perdona. Que el perdón sea un buen hábito pero de nada sirve si una ofensa o falta se recuerda frecuentemente. El perdón y olvido son efectivos cuando se trabaja fuertemente en no volver a repetir un error.
Conózcanse
Cuando se tiene claros los intereses, gustos, expectativas y dificultades se reducen las posibilidades de pelear, hay que ser solidarios y tolerantes porque todos tenemos problemas y con amor se pueden solucionar, recuerda que los problemas del uno son los problemas del otro.
Practica estas buenas costumbres y tu relación se mantendrá sana y fuerte para enfrentarse a las dificultades, no olvides que lo importante no es que no hayan problemas sino saberlos afrontar.