Revelan imágenes de la verdadera tumba de La Llorona: ¿Dónde está ubicada?

Alrededor del mundo existen una infinidad de mitos y leyendas en torno a diversos personajes que tienen historias particulares muy terroríficas. Una de las más conocidas en Latinoamérica es la de La Llorona, cuyo origen es mexicano. 

La Leyenda de La Llorona es una historia muy arraigada en la mitología de este país que ha pasado de generación en generación. Según cuentan los ancestros, La Llorona era una mujer indígena muy hermosa que se enamoró de un hombre rico. 

Fruto de su amor tuvieron dos hijos juntos; sin embargo, el hombre no estaba dispuesto a dejar de lado su alto estatus social para casarse con ella, por lo que ella tomó medidas desesperadas para no ser abandonada.

En un acto de desesperación y locura, la mujer decidió ahogar a sus propios hijos en un río como una venganza contra su amante. Sin embargo, una vez cometió el acto, el remordimiento la consumió, y enloquecida, buscó a sus hijos hasta fallecer. No obstante, estaría condenada a permanecer por la eternidad llorando y vagando por diversas zonas. 

Se dice que La Llorona es escuchada gritando "¡Ay, mis hijos!", y que su presencia provoca mucho terror en aquellos que la ven. Muchos creen que La Llorona está destinada a penar por siempre por sus acciones y que su lamento es una advertencia para aquellos que desafían las normas sociales. Esta leyenda ha perdurado como una parte significativa del folclore mexicano, transmitiéndose de generación en generación.

Pero más allá de ser un simple mito, muchos aseguran que este hecho fue real y de hecho la tumba de esta mujer está situada en un pequeño pueblo a cuatro horas de la Ciudad de México. 

Algunos youtubers e influencers han visitado la zona llamada El Pueblo de los Dolores, en Hidalgo, estado de Guanajuato y han registrado en video el momento en nombre de esta mujer donde debajo repisarían sus restos. No obstante, hay quienes dicen que para poder conocer el sitio se requiere de un permiso especial. 

Los pobladores de la zona señalan, según El Heraldo que desde aproximadamente el año 1800 el llanto de esta mujer se escucha con mucha fuerza en las noches y no le permite dormir plácidamente a nadie que esté a sus alrededores. También cuentan que muchos frailes han acudido para darle paz a la mujer, pero se han encontrado con llantos aterradores que los ahuyentan. Por tal motivo, el Vaticano decidió poner una placa en su nombre.