Candida auris: el hongo que podría convertirse en una próxima pandemia

Aún sin haber superado la crisis sanitaria por la pandemia de la COVID-19, nace un nuevo miedo en la sociedad por la alerta de un nuevo patógeno que podría convertirse en la próxima pandemia si no se toman las respectivas medidas para evitar su propagación y crear una barrera efectiva de protección contra el mismo.

Se trata de una advertencia realizada por científicos de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC), de Estados Unidos, sobre el Candida auris, una infección fúngica similar a una levadura que puede ser potencialmente “mortal”. “en algunos pacientes, esta levadura puede ingresar al torrente sanguíneo y diseminarse por todo el cuerpo, causando infecciones invasivas graves”, señala el CDC en su portal web.

Su historia

Este hongo fue detectado por primera vez en Japón en el año 2009 y con el paso de los años ha ido evolucionando en distintos tipos de cepas, incrementando el número de infecciones en todo el mundo. De hecho, son más de 30 países en los cuales se ha notificado infecciones por Candida auris, entre los cuales se encuentra Colombia.

¿Cómo se transmite y qué infecciones causa?

Según el CDC, este hongo puede transmitirse en entornos médicos a través del contacto con superficies o equipos ambientales contaminados, o de persona a persona. Sin embargo, aún se requieren más estudios para entender mejor su propagación. Quienes lo contraen pueden desarrollar infecciones del torrente sanguíneo, infecciones de heridas e infecciones de oído; aún no está claro si causa infecciones en el pulmón o la vejiga.

Las preocupaciones de los expertos

Hay tres motivos en especial que tienen preocupados a los científicos del CDC respecto a este hongo que amenaza la salud mundial; estos son:

Por lo general es resistente a los fármacos que se utilizan para tratar infecciones por Candida; de hecho, algunas cepas son resistentes a los tres tipos de antifúngicos que actualmente están disponibles.

Su identificación es muy compleja con los métodos de laboratorio estándar, y en algunas ocasiones puede ser errónea en los laboratorios que no cuentan con una tecnología específica. Esto puede dar lugar a una gestión inadecuada.

Ha generado brotes en entornos sanitarios, por lo cual es indispensable que se identifique rápidamente en pacientes que se encuentran hospitalizados y que los centros de salud tomen las precauciones especiales para detener su propagación.