Mujer fue al médico por no poder respirar bien y le descubrieron cientos de gusanos en la nariz
La mujer creyó tener polvo en sus fosas nasales, pero en realidad su nariz estaba llena de gusanos.
La mujer creyó tener polvo en sus fosas nasales, pero en realidad su nariz estaba llena de gusanos.
Los servicios de urgencias alrededor del mundo a diario reciben casos médicos de todo tipo, desde personas con virus comunes, hasta patologías extrañas y difíciles de descifrar.
Este último fue el caso de una mujer en Tailandia que decidió ir a un hospital local para que le revisaran sus fosas nasales, pues creía tenerlas tapadas con polvo, pero lo que descubrieron los especialistas la dejó aterrada y asqueada.
Según medios regionales, la mujer llegó al hospital de Nakornping, ubicado en Chiang Mai, al norte del país, con “dificultades para respirar”, por lo que la remitieron al otorrinolaringólogo. Cuando este la examinó, vio extrañas criaturas moviéndose en el interior de sus fosas nasales.
Al realizarle una revisión exhaustiva el doctor determinó que se trataba de la presencia de gusanos. Cabe destacar que anteriormente otros especialistas habían diagnosticado a esta paciente con patologías comunes como sinusitis y congestión nasal.
Antes de acudir al médico, la joven presentó episodios de sangrado nasal y dolor facial; no obstante, no fue hasta que la situación se tornó más grave que decidió visitar a un especialista. Al percatarse de lo sucedido, el otorrinolaringólogo vio necesario hacerle un escaneo con rayos x y posteriormente una endoscopia, la cual reveló que en el interior de su nariz tenía más de 100 gusanos.
Según lo relatado por el medio británico The Mirror, los parásitos fueron extraídos por personal del hospital y por fortuna la mujer se encuentra fuera de peligro. Las razones por las cuales se desarrollaron estos gusanos en las cavidades nasales de la mujer son desconocidas. Se cree que pudo deberse a la contaminación.
Los médicos revelaron que de no haber hecho la intervención a tiempo, las larvas podrían haber llegado a afectar otros órganos, por lo cual se hubiera complicado la situación hasta provocar una discapacidad o incluso causar la muerte.