Joven fue al médico al no parar de eructar y le diagnosticaron cáncer de colon
Una joven, de 24 años de edad, no podía parar de eructar y fue al médico al pensar que se trataba de una indigestión, sin embargo, recibió un sorpresivo diagnóstico: cáncer de colon.
Una joven, de 24 años de edad, no podía parar de eructar y fue al médico al pensar que se trataba de una indigestión, sin embargo, recibió un sorpresivo diagnóstico: cáncer de colon.
Síntomas que a simple vista parecen ser un simple mal común o a los que pocas personas suelen prestar atención, en ocasiones se convierten en terribles diagnósticos de enfermedades que requieren tratamientos más complejos, o que incluso pueden llegar a ser mortales, motivo por el cual los profesionales insisten en la importancia de realizar chequeos frecuentes y no subestimar ningún signo del cuerpo.
Una situación de este tipo tuvo que enfrentar una joven de tan solo 24 años de edad, quien sufría constantemente de molestias estomacales y eructos que no podía controlar, lo que la llevó a pensar que se trataba de un caso de indigestión, sin embargo, recibió un angustiante y sorpresivo diagnóstico, pues le informaron que se trataba de un cáncer de colon en fase 3.
Se trata de Bailey McBreen, una enfermera estadounidense, quien ha dado a conocer todo su proceso a través de sus redes sociales; precisamente, por ese mismo medio contó que todo inició con el ardor que le provocaba terribles reflujos, aunque lo que realmente la llevó a asistir al médico fueron los eructos que no paraban, durante un viaje a Nashville que realizó con su prometido.
Desde que se enteró que era dicha enfermedad terminal por una tomografía que le fue realizada, ha tenido que someterse a dos cirugías, y la extracción de su apéndice y 52 ganglios linfáticos para eliminar parte del tumor, sin embargo, los expertos no pudieron retirarlo por completo por la zona en la que se encuentra ubicado.
Y aunque su oncólogo le mencionó que los eructos no suelen ser un síntoma común del cáncer de colón, fue gracias a ellos que conoció su estado de salud y pudo recurrir a un tratamiento para ello, el cual era urgente pues el tumor estaba comprimiendo sus intestinos. Para todo esto, además, ha tenido que pedir ayuda económica de las personas que han conocido su caso, pues los gastos son excesivos, para lo cual abrió una recolección de fondos en la plataforma GoFundMe.
Ahora continúa en su proceso de recuperación y ha tenido que modificar muchos de sus hábitos, como la alimentación, aunque mantiene algunos otros para llevar su vida con normalidad. Además, tomó la decisión de congelar sus óvulos, para poder ser madre en el momento en el que pueda superar la enfermedad, pues este siempre fue su deseo y se sigue manteniendo intacto, sin importar sus complicaciones; “cualquier cantidad ayuda, pero lo más importante son las oraciones mientras trato de combatir esta enfermedad”, dijo.