Hígado graso: consumir esta fruta con regularidad ayuda a combatir este problema
La enfermedad por hígado graso no alcohólico (EHGNA) es la enfermedad hepática más frecuente en todo el mundo en la actualidad.
La enfermedad por hígado graso no alcohólico (EHGNA) es la enfermedad hepática más frecuente en todo el mundo en la actualidad.
El hígado es el órgano más grande dentro del cuerpo, su función principal es ayudar a digerir los alimentos, almacenar energía y eliminar las toxinas. Cuando este acumula mucha grasa desarrolla una enfermedad conocida como hígado graso que puede ser de dos tipos: alcohólico y no alcohólico.
El primer tipo es el menos grave, ya que no genera ninguna inflamación o daño en las células del hígado; no obstante, en algunos casos puede causar fibrosis o cicatrización en el hígado, promoviendo el desarrollo de cirrosis o cáncer.
El segundo tipo se debe al alto consumo de alcohol, ya que el hígado descompone la mayor parte del alcohol, pero pueden quedar sustancias dañinas acumuladas durante este proceso. “Estas sustancias pueden dañar las células del hígado, provocar inflamación y debilitar las defensas naturales del cuerpo. Cuanto más alcohol usted bebe, más daña su hígado”, señalan los expertos de la biblioteca de medicina Medline Plus.
Existen algunas personas que tienen un mayor riesgo de sufrir la enfermedad del hígado graso, como quienes sufren patologías subyacentes, entre las que están: la diabetes, presión alta y colesterol y triglicéridos elevados.
“La enfermedad por hígado graso afecta a cerca del 25% de la población en el mundo. Así como las tasas de obesidad, diabetes tipo 2 y colesterol alto están subiendo en los EE. UU., lo mismo ocurre con la tasa de enfermedad por hígado graso. Es el trastorno hepático crónico más común en los EE. UU”, añaden los expertos.
La enfermedad del hígado graso se presenta de forma silenciosa en la mayoría de los casos. Algunas personas pueden manifestar cansancio crónico o tener molestias en el lado superior derecho del abdomen. Ante estos síntomas la recomendación es acudir a un especialista.
Para prevenir el hígado graso, los profesionales de la salud recomiendan tener una dieta equilibrada y saludable, estar vacunados contra la hepatitis A y B, la gripe y la enfermedad neumocócica y hacer ejercicio con regularidad.
Adicionalmente, estudios recientes han demostrado que el consumo frecuente de una fruta en particular puede ayudar a combatir el hígado graso. Se trata del tamarindo, cuyas propiedades antioxidantes, antibacterianos, antivirales y antifúngicos, permiten una limpieza efectiva de este órgano.
Entre los usos medicinales del tamarindo están: bajar la fiebre, atenuar el asma, disminuir la intoxicación alcohólica, combatir los problemas digestivos, reducir el colesterol, controlar la diabetes, prevenir el envejecimiento prematuro y cuidar la vista, entre muchos otros.
Según el portal Tua Saúde, la mejor forma de combatir el hígado graso con tamarindo es consumiéndolo en infusión o té. “El tamarindo puede ser usado para preparar bebidas refrescantes, como condimento de comidas, o como ingrediente de diferentes preparaciones, como postres, salsas, helados y mermeladas. Además de eso, sus vainas, flores y hojas pueden ser aprovechadas para preparar infusiones o agua de tamarindo, aportando todas sus propiedades”, concluye.