Violencia en San Calixto: quemaron la sede de la Registraduría durante recuento de votos

En la noche del martes 31 de octubre y en medio del recuento de votos, se presentó una grave situación de orden público en el municipio San Calixto, Norte de Santander. Allí, sujetos aún sin identificar llegaron hasta el casco urbano y prendieron fuego a la sede de la Alcaldía, la Casa de la Cultura y la Registraduría junto con el material electoral que allí se encontraba. De acuerdo con primeras versiones, esto habría ocurrido a modo de descontento por los resultados electorales.

En esa zona ubicada en el Catatumbo se presentaron tres aspirantes: José Luis Franco, por el Partido Ecologista Colombiano y quien obtuvo 174 votos (2.65%); Nicolás López García, del Polo Democrático y que ocupó el segundo lugar con 3.075 votos (46.95%) y el ganador, José Luis Balma Pinzón del movimiento ‘Con la gente’ y con 3.278 sufragios a su favor, reflejados en el 50.05% del electorado en el municipio.

Incluso, según lo indicado presuntamente por el candidato perdedor, las disidencias de las Farc habrían incidido en los resultados; sin embargo, se sabe que tan pronto se registraron los desmanes, la Policía y el Ejército hicieron presencia en el lugar para retomar el control; además, primeras hipótesis no descartaron la injerencia de un grupo criminal en estos ataques a la infraestructura de la población y al proceso electoral. 

Este hecho se sumó a los registrados en poblaciones como Gamarra (Cesar); Manaure (La Guajira); Tiquisio (Bolívar) y Santiago (Putumayo), todos estos directamente relacionados con la jornada electoral efectuada el domingo 29 de octubre. Vale mencionar que un reciente informe de la Defensoría del Pueblo indicó que en todo el país ocurrieron, hasta el momento, 98 eventos de protesta en 86 municipios de 24 departamentos; de estos, 77 ocurrieron después de los comicios territoriales.

Según el análisis realizado por el Observatorio de Conflictividad Social de esta entidad, entre las principales motivaciones para generar esas manifestaciones estuvieron el desconocimiento de los resultados con un 42% de incidencia debido al estrecho margen de diferencia de votos entre un candidato y otro, sobre todo en municipios pequeños. Otro factor fue la denuncia de posibles irregularidades, especialmente ligadas al fraude electoral con un 29%. El 17% de los hechos se produjeron por diversas reclamaciones del electorado, el 5% fue a causa de la polarización política y un 4% por pugnacidad.

Según la entidad, los hechos más relevantes ocurrieron en 13 zonas donde, además, se presentó la quema de material electoral: Imúes, La Cruz y El Rosario (Nariño), Fonseca (La Guajira), Palocabildo (Tolima), Ricaurte (Nariño), Santiago (Putumayo); Tiquisio (Bolívar), Almaguer y Balboa (Cauca), Pueblo Rico (Antioquia), Gachantivá (Boyacá), La Paz (Cesar) y Chinú (Córdoba). Bajo este escenario, la Defensoría mantuvo su compromiso de guardar acompañamiento en todo el país, sobre todo las de mayor riesgo identificadas también previo a los comicios del pasado domingo.