Junior vs. DIM: El campeonato en el que el poderoso fue campeón… apenas por 7 minutos

Este domingo 10 de diciembre se llevará a cabo el primer round de la gran final del fútbol profesional colombiano, donde los protagonistas serán Independiente Medellín, ganador del cuadrangular B, con una fecha de anticipación y Junior de Barranquilla, ganador del grupo A y que viene en ascenso, consiguiendo el cupo ante Deportes Tolima, que fue el equipo más fuerte a lo largo del cuadrangular, pero que se fundió en los últimos partidos.

De esta forma, el Metropolitano de Barranquilla espera con ansias la llegada de ambas escuadras, para este primer partido que está programado para las 4 de la tarde. Esta será la tercera final protagonizada por estos dos equipos, con una victoria para cada uno. Pero además, también han sido protagonistas en varias definiciones, una de las cuales recordaremos a continuación.

La máquina del tiempo deberá regresar hasta el año de 1993, un año convulso en Colombia donde, para estas fechas, era noticia en todos los medios la caída del capo más siniestro de la historia de Colombia. Este mismo año dejaría un sabor amargo para los hinchas de Independiente Medellín, aunque felicidad completa para los del Junior, pues entre los dos se definía la edición 46 del torneo de fútbol colombiano.

En aquella oportunidad, los ocho mejores pasaban a segunda fase, donde se dividían en dos grupos de 4, de donde salían los dos mejores de cada uno, para formar un último cuadrangular final. Hasta este llegaron Junior, Medellín, Nacional y América. Tiburones y poderosos llegaban con opciones de quedar campeones a la última fecha, en la que el rojo de la montaña debía vencer a Atlético Nacional y esperar que los barranquilleros no vencieran a América.

El clásico antioqueño terminó con victoria para el poderoso por la mínima diferencia, pero terminó 7 minutos antes de que finalizara el fútbol en el Metropolitano, donde escarlatas y rojiblancos empataban a dos goles, por lo que el campeón, en ese momento, era Deportivo Independiente Medellín.

Pero en la última jugada del encuentro en Barranquilla, Oswaldo Mackenzie puso el tercero para el junior, lo que significó la victoria rojiblanca en la capital atlanticense y, por diferencia de gol, la tercera estrella de la historia del tiburón, en detrimento del poderoso. De aquella vez, en el recuerdo quedó la imagen de algunos jugadores poderosos celebrando el juego, en esos 7 minutos que, pensaban, habían logrado la felicidad que significa ser campeón.