Por: Camila Méndez Sastoque • Colombia.com

Las estrellas suelen parpadear debido a ciertos elementos que habitan en el universo

La ciencia ha estado indagando sobre el parpadeo de las estrellas y la luz que deja luego de morir.

Foto: Shutterstock
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La ciencia ha estado indagando sobre el parpadeo de las estrellas y la luz que deja luego de morir.

Si en algún momento has mirado hacia el cielo y está despejado, pero vez un par de luces parpadear, claramente pueden ser estrellas, pues es el momento en que podemos verlas con total claridad.

La ciencia ha intentado investigar sobre qué pasa en este universo que se mueve constantemente, así como las estrellas que tiene un par de movimientos casi mágicos y ahora nos brindan respuestas. Cuando la noche está despejada y estrella es el mejor momento para apreciar este fenómeno que es muy encantador a simple vista.

La Luna y las estrellas hacen parte del gran universo que habitamos y todo parece moverse en cierta dirección, según los expertos, la atmósfera terrestre se extiende por uno 10.000 km desde la superficie de la Tierra. Sin embargo, es posible estar observando estrellas que ya no existen, pero debido a que la luz llega de hace millones de años hasta ese momento nos está llegando su información.

En cuanto al parpadeo, esos rayos de luz cuando llegan a la atmósfera pueden verse afectados por algunos gases o fluctuaciones que son los que hacen que veamos un efecto óptico, ese parpadeo que parece que se mueve por momentos. Ahora, ya sabremos que esta manera de ver las estrellas tiene una explicación científica que no conocíamos.

Según la ciencia, a esto se le conoce como centello atmosférico, este ha sido un fenómeno de investigación para muchos, pues por el tiempo que llevan allí y el tiempo en que duramos viéndolas después de haber muerto luego de varios años. Cabe resaltar que el Sol también es una estrella, pero el planeta dependen de ella.

Esta gran estrella, que siguen habiendo más detrás de ella, y más grandes, pero es una de las más potentes, que también sufre los efectos de una atmósfera con nubes y fenómenos que en algunos momentos impiden que su luz nos golpee de lleno.