Por: Juan Carlos Garcia Sierra • Colombia.com

Dieta: si reconfiguramos nuestros cerebros podremos dejar de comer en exceso

Al lograr identificar cuándo estamos llenos, cuándo tenemos hambre y cuáles son las comidas que solemos ingerir por hábitos inconscientes, podremos cumplir nuestros objetivos.

Con reconfiguración cerebral se puede identificar alimentos que no se deben comer. Foto: Pixabay
Con reconfiguración cerebral se puede identificar alimentos que no se deben comer. Foto: Pixabay

Al lograr identificar cuándo estamos llenos, cuándo tenemos hambre y cuáles son las comidas que solemos ingerir por hábitos inconscientes, podremos cumplir nuestros objetivos.

Realizar una dieta puede ser para muchas personas una tarea difícil que no puede ser cumplida de manera cabal porque muchas veces la voluntad flaquea o no logran reconocer bien cómo es afectada por los procesos cerebrales.

Desde el lado de la neurología, un experto en esta ciencia revela que sí se puede dejar de comer en exceso siempre y cuando se logre ´reconfigurar´ el cerebro de la manera correcta.

Una dieta no significa dejar de comer, pues eso significa problemas de salud, lo indicado es dejar de ingerir ciertos alimentos y reducir las cantidades y los periodos de tiempo entre comida y comida.

Seguimos comiendo así no tengamos hambre

Judson Brewer psiquiatra y neurocientíficos, explicó que los grandes problemas detrás de la dieta moderna es quemar las calorías que comemos y el ´hambre emocional´, que significa continuar comiendo, aunque no tengamos hambre.

El experto dice que sobre el papel la fórmula de contar calorías es un método sencillo, pero no basta con tenerlas en cuenta, sino quemarlas, por lo que resulta frustrante para muchos no poder hacerlo y por eso abandonan las dietas rápidamente.

Brewer, quien escribió el libro ´The Hunger Habit´ que la clave está en reconfigurar nuestros cerebros, lo que significa aprender a reconocer cuándo estamos llenos y cuándo realmente tenemos hambre, así como reconocer los alimentos que nos van a servir para nuestros objetivos y cuáles estamos buscando por hábitos inconscientes y los mecanismos de supervivencia incorporados en nuestros cerebros.

El experto afirma que nuestros antepasados no tenían refrigeradores, por eso tenían que ingerir lo que cazaran o cultivaran y al tener el tiempo en contra, debían ingerir los alimentos, pero actualmente contamos con todas las formas para preservar y disponer permanentemente de comidas que no necesariamente son alimentos y las consumimos de acuerdo con nuestro estado de ánimo.

Para el experto en neurociencia, las personas no logran cumplir sus dietas solo con voluntad, pues esta puede verse afectada al cabo de un tiempo, sino que tienen que ser conscientes de que lo comen es bueno y les servirá, es como disfrutar y saborear la comida mientras realizan este proceso mental sin distracciones como la televisión o el celular, por ejemplo.

Programar la mente para cambiar de hábitos alimenticios es posible y cuando lo logremos veremos magníficos resultados reflejados en nuestra salud.