Fiscal General asegura que Guacho es el "brazo armado del Cartel de Sinaloa"

El fiscal general de la nación, Néstor Humberto Martínez, afirmó que la disidencia de las FARC, liderada por Walter Patricio Arizala, alias ‘Guacho’, es el "brazo armado" del Cartel de Sinaloa, lo cual considera grave ya que sería un problema geopolítico.

La afirmación fue hecha durante su intervención en el Congreso Nacional de Municipios en Cartagena, donde aseguró que Colombia podría convertirse en la ‘manzana podrida’ del continente, debido a los escándalos de narcotráfico y corrupción recientes, acotando que lo de ‘Guacho’ ya es algo de mayor escala.

Además, sostuvo que la información recabada por el ente ha sido judicializada, lo que ratifica os nexos del exguerrillero con uno de los carteles más poderosos de México, el sinaloense.

En ese sentido, mencionó con suma preocupación que este tipo de situaciones coloca a la nación cafetera en un camino donde podría convertirse en un problema geopolítico para su región en América Latina, por lo que es necesario refundar la política de la lucha contra las drogas, a riesgo de perder la institucionalidad con amenazas de antaño.

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Martínez, manifestó que “Colombia no se puede ir convirtiendo en un problema geopolítico para la región. Hoy con la droga y las disidencias de las FARC en el sur del país, con Guacho y todos sus disidentes que constituyen, según información que tenemos judicializada en la Fiscalía, el brazo armado del Cartel de Sinaloa, nos vamos a convertir en un problema geopolítico”.

También recalcó la necesidad de la cooperación internacional para erradicar exitosamente los cultivos ilícitos, además de implementar proyectos productivos sostenibles para los campesinos que lamentablemente han incurrido en ellos.

“El problema de la paz en Colombia se llama narcotráfico”, puntualizó Martínez.

El fiscal general, explicó que “En doce territorios en Colombia están creciendo exponencialmente las tasas de homicidio, algo insólito en medio del postconflicto. Nordeste antioqueño, sur de Córdoba, Catatumbo, Pacífico caucano, Nariño, Arauca, Norte del Cauca. Esta tendencia al crecimiento del homicidio es producto de presiones de bandas organizadas que están tratando de cooptar los territorios dejados por las FARC para los cultivos ilícitos”.

Martínez acotó que esta situación está afectando "la tranquilidad y el sosiego ciudadano de un país amigo y limítrofe como el Ecuador", debido al reciente asesinato del equipo periodístico del diario ‘El Comercio’ de esa nación, además de un nuevo secuestro de dos personas ecuatorianas, ambos hechos originados por el grupo disidente autodenominado "Frente Oliver Sinisterra".

El vicepresidente de Juan Manuel Santos, Óscar Naranjo, informó públicamente que las autoridades colombianas tienen como prioridad, “cerrarle el paso a quienes quieren sembrar violencia en la zona de frontera”.

Según lo informado por el presidente de Ecuador, Lenín Moreno, el asesinato del equipo periodístico y el secuestro de una pareja se dieron en el marco de la lucha contra narcotraficantes en la provincia fronteriza de Esmeraldas.

Desde finales de enero, en esa zona ecuatoriana disidentes de las FARC han detonado al menos siete explosivos, que han provocado la muerte de cuatro infantes de marina.

Por su parte, la canciller colombiana, María Ángela Holguín, dio a conocer este jueves que, el Estado colombiano ordenó "el despliegue de 12.000 soldados y policías con puesto de mando en el municipio de Tumaco", en el departamento de Nariño (suroeste), como parte de la lucha contra los delitos mencionados, que indudablemente afectan a ambas naciones.

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Ma. Gabriela Garofalo - Colombia.com