Gobierno y ganaderos firman pacto de compra y venta de tierras para la Reforma Agraria

Este sábado 8 de octubre, el Gobierno Nacional y la Federación Colombiana de Ganaderos (FEDEGÁN), firmaron un acuerdo que posibilitará la compraventa de 3 millones de hectáreas de tierras fértiles, las cuales serán destinadas a la reforma agraria anunciada por Petro desde el inicio de su campaña electoral.

En un acto que el presidente Gustavo Petro califica como histórico, el Gobierno estableció que los tres millones de hectáreas adquiridos serán para entregar a los campesinos y campesinas del país, avanzando así en la Reforma Agraria Integral con el objetivo común de la Paz Total en Colombia.

“Se firmó un pacto. Es un pacto que a mí me parece histórico, porque, ni más ni menos, podría permitir hacer la Reforma Agraria en Colombia. Es la decisión libre de los poseedores de tierra, dedicados a las ganaderías extensivas, de vender una parte de tierras fértiles que tienen un mejor uso en el mundo agropecuario, para ser entregadas a los campesinos y campesinas de Colombia”, afirmó el mandatario del país al finalizar la firma del acuerdo.

El acuerdo fue firmado por el ministerio de Agricultura y Desarrollo Rural, el ministerio del Interior y la Oficina del Alto Comisionado para la Paz, y por el presidente de Fedegán, José Félix Lafaurie.

Tras llegar a un acuerdo con el Gobierno, Lafaurie expuso que  “Fedegán siempre ha rechazado la expropiación sumaria, pero nunca hemos estado en contra del derecho del campesino a la tierra, acompañada de las condiciones que la hacen realmente productiva".

Siendo así, Petro asegura que la participación de Fedegán en este acuerdo constituye una expresión de buena voluntad con la construcción de paz territorial, además, cabe destacar que las tierras serán vendidas de forma voluntaria por los propietarios de las tierras, que se comprometen a hacerlo por el valor comercial, tal y como lo dispone la Ley 160 de 1994.

Finalmente, Petro anunció que, a partir de este acuerdo, “empieza un trabajo conjunto entre Fedegán y el Ministerio de Agricultura, donde indudablemente, lo más difícil es conseguir los dineros para que a un ritmo de unas 500 mil hectáreas anuales pudiéramos avanzar y, fundamentalmente, para que exista una especie de ‘combo’, de conjunto de aplicaciones sobre la tierra que se vende”.

De esta manera, el Presidente deja claro que no se trata solamente de entregar una tierra, sino que al momento de la entrega, esa tierra esté acompañada de la base institucional indispensable para producir.