Seguidores de Jair Bolsonaro invaden Congreso brasilero y piden la salida de Lula da Silva

Con apenas unos días de posesionado Luiz Inácio da Silva como presidente de Brasil ya tiene que afrontar su primera dificultad luego de que seguidores de Jair Bolsonaro, expresidente de la nación, invadieran el Planalto, la sede del poder ejecutivo y la Corte Suprema.

El presidente Lula da Silva se encuentra visitando Sao Paulo y los invasores se tomaron varios edificios gubernamentales reclamando la salida del actual mandatario y la vuelta al poder del derechista y exmilitar brasileño.

Los seguidores de Bolsonaro derribaron las barreras de contención existentes alrededor de los edificios ejecutivos en Brasilia y atacaron a los policías destacado en el lugar, mientras se estudia una posible intervención militar para desalojar a los manifestantes.

Lula da Sila y Jair Bolsonaro disputaron las elecciones presidenciales en medio de un clima de polarización, y con la victoria del exlíder sindical, son muchos los brasileros descontentos con su vuelta por tercera ocasión al poder, considerando rechazo a la izquierda encarnada en el nuevo mandatario.

Las elecciones pasadas que dejaron a Lula da Silva como presidente del gigante suramericano arrojaron una victoria del líder de izquierda con un 51% de los votos, mientras que Jair Bolsonaro conquistó el 49%, hechos considerados por los bolsonaristas como un fraude y alegan la vuelta del exderechista al poder.

Decenas de autobuses llegaron el sábado con miles seguidores de Bolsonaro a Brasilia, capital del país, con miles de seguidores del exmilitar y las fuerzas del orden se mostraron inquietas ante una posible manifestación de inconformidad de estos, sin embargo, fue hasta el domingo que decidieron tomarse los edificios del poder ejecutivo.

Desde el pasado 30 de diciembre miles de seguidores de Jair Bolsonaro montaron campamentos en diferentes ciudades del país y mostraron estar listos para reclamar la vuelta de Bolsonaro al poder, pues consideran que los conteos de los votos en los comicios no se realizaron dentro de la legalidad.

En los videos difundidos en redes sociales y diversos medios de comunicación se ven a manifestantes bolsonaristas rompiendo los ventanales de los edificios gubernamentales e irrumpiendo en ellos a la fuerza, imágenes que hacen recordar a los seguidores de Donald Trump haciendo lo mismo en enero de 2021 en el Capitolio de Washington.

Los manifestantes afirman que quieren derrocar a Lula da Silva, pues no están conformes con la vuelta de la izquierda al poder en uno de los países más grandes y populosos del mundo, y varios de ellos se encuentran con palos y elementos contundentes, mientras que las fuerzas del orden han lanzado gases lacrimógenos para dispersar a la turba.