Joven se infectó con bacteria come carne y murió tras aplicarse una inyección para la gripa

En los últimos años, se han reportado varios casos de muertes por infecciones bacterianas, especialmente aquellas que afectan la piel y provocan complicaciones severas. Estos microorganismos pueden causar daños permanentes e incluso ser mortales.

En fechas recientes se conoció un caso que ha alertado a la comunidad médica. Un joven de 33 años contrajo una bacteria come carne tras aplicarse una vacuna para aliviar los síntomas de la gripa.

Su nombre era Brayan Ojeda, quien trabajaba como ayudante de construcción en Bucaramanga, Santander. El joven acudió a una farmacia para detener su malestar con una inyección, el mal llamado “matrimonio”, sin saber que días después le provocaría la muerte. 

El joven se inoculó el 22 de mayo de 2022 y el 24 del mismo mes comenzó a presentar síntomas extraños, como pérdida de movilidad en la pierna que había recibido la inyección y desorientación. “El martes volvió a ir a trabajar y como a las 9 de la mañana llegaron con él alzado, que no podía, que le dolía la pierna terrible”, comentó Karen Ojeda, hermana de Brayan, en entrevista para Séptimo Día. 

Ante la gravedad de la situación, los familiares del joven decidieron llevarlo a la Clínica Chicamocha, donde los médicos le diagnosticaron una infección por una bacteria come carne. “Me decía que era grave, ‘me van a abrir la pierna y me van a quitar un pedazo’, me dijo: ‘ma, es que lo que tengo es grave, me puedo morir’”, señaló Yamile Ferreira, madre de Brayan. 

Los médicos actuaron con rapidez e intervinieron quirúrgicamente a Brayan para realizarle una limpieza en la zona, ya que la bacteria come carne ya había afectado los músculos y ligamentos; sin embargo, su estado de salud no mejoró.

Con el paso de las horas, el joven comenzó a presentar complicaciones que terminaron en una amputación completa de su pierna; no obstante, falleció en la madrugada del jueves 26 de mayo de 2022. 

El informe de Medicina Legal reveló que la causa de muerte fue una “fascitis necrosante fulminante y síndrome de shock tóxico tras inyección intramuscular en el glúteo”, afecciones que le ocasionaron daños irreversibles en el organismo.