Cuando Ryan Gosling se quedó gordo y sin trabajo por diferencias creativas
Ryan Gosling engordó porque creía que a uno de sus papeles en una película le vendría bien, pero al director no le gustó y lo despidió alegando diferencias creativas.
Ryan Gosling engordó porque creía que a uno de sus papeles en una película le vendría bien, pero al director no le gustó y lo despidió alegando diferencias creativas.
Nadie duda de la capacidad actoral de Ryan Gosling, pues a lo largo de su carrera ha interpretado muy buenos papeles y desde el estreno de Barbie ha estado en boca de todos, pues su encarnación de Ken ha dejado a muchos más que satisfechos, mientras que otros creen que el actor ha perdido condición de actor serio por dicha incursión.
Barbie se convirtió en una película de devoción, que más allá de su estética, parece contar con un carácter crítico de una sociedad consumista y artificial, y las actuaciones de sus protagonistas han sido elevadas como dignas de premio Oscar, algo que muchos críticos consideran exagerada, pero que generó molestia entre los fanáticos porque Margot Robbie, su protagonista no aparece en el listado de nominadas.
Ryan Gosling es uno de los aspirantes al mejor actor de reparto, justamente por su papel de Ken en Barbie, consiguiendo su tercera nominación luego de Half Nelson en 2006 y La La Land en 2016.
Afuera por obeso
Una de las características del papel de Ken en Barbie es que el actor que lo encarnara debía contar con un aspecto físico envidiable, consistente en ser rubio, superatlético y apuesto, algo que el actor canadiense logró para la película, pero detrás de sus músculos y atractivo, en alguna oportunidad fue rechazado por gordo.
The Lovely Bones, película del director Peter Jackson, el mismo de El Señor de los Anillos, originalmente contaría con la participación de Ryan Gosling en el papel principal, así es que el actor decidió darle un perfil a este, y una de sus tareas fue moldear físicamente al personaje y decidió que debería ser un hombre gordo, por eso el actor se sometió a un proceso de ´engordamiento´ basado en helado que lo llevó a pesar 100 kilos.
Gosling estaba satisfecho con la forma de su personaje, pero al parecer, a quien no gustó fue a Peter Jackson, quien decidió apartarlo de la producción alegando diferencias creativas, lo que hizo que el actor quedara desempleado porque había rechazado papeles que luego de su salida de la película de Jackson estaban en producción.
Ryan Gosling no tardó mucho en encontrar otro papel y en bajar de peso y contar nuevamente con un cuerpo esbelto que le sirvió para ser llamado a otras películas.