Carolina Cruz reveló que pasó con Lincoln Palomeque y si llegó a ser celosa

Carolina Cruz sin duda ha pasado por un año complicado en cuanto a aspectos personales y es que después de casi 14 años de relación, ella y Lincoln Palomeque le pusieron fin al amor a pesar de tener dos hijos fruto de su cariño, por lo que aunque han pasado varios meses desde que se dio la noticia, aún sigue siendo curioso el porqué decidieron terminar y como fue su relación.

A pesar de que muchos seguidores creen que la relación terminó de mala manera, por el contrario por su salud mental y la de sus hijos ellos mantienen una buena relación y en varias ocasiones lo han demostrado por medio de redes sociales, de hecho son todo un ejemplo para las parejas separadas con hijos.

Ahora bien, la presentadora ofreció una entrevista para la revista Don Juan en donde dio algunos detalles de lo que fue su relación con el actor y padre de sus hijos. Primero que todo Cruz aseguró que aunque tuvo varias ofertas para estar en el mundo de la actuación decidió rechazarlas por lo que veía con su ex esposo.

Según lo dicho por Carolina, “Sé lo difícil que es la carrera, sé lo complejo que es para ellos tener todo y luego no tener nada. No es fácil. Hay estabilidad mientras se tiene trabajo, pero un desequilibrio mientras no, y eso que Lincoln es un hombre supremamente organizado con su plata, con sus cosas”.

Por otro lado habló sobre los papeles que tenía Lincoln en donde en muchas ocasiones tenía que tener acercamientos con otras mujeres, por lo que Carolina aseguró, “No por nada malo, si coincidía y lo veía, bien, pero no me sentaba como una loca tóxica al frente de televisor”.

En cuanto a si en algún momento fue celosa con su pareja, Carolina comentó, “Nunca he sido una mujer celosa, ¡con todos los cachos que me han puesto y nunca he sido celosa! No es mi personalidad. Soy de un temperamento muy tranquilo, no me gusta joderle la vida a nadie precisamente para que no vengan a joderme la mía. Yo conocí a Lincoln siendo actor, yo no veía las cosas que él hacía, no por nada malo, si coincidía y lo veía, bien, pero no me sentaba como una loca tóxica al frente de televisor”.

Es precisamente por esto que la pareja logró terminar bien, pues siempre tuvo una personalidad muy tranquila, “Dios es pasado de especial conmigo, él me tiene como la niña consentida de sus ojos, y yo sé que él me va a mandar lo que tenga que ser y en el momento que tenga que ser”.