Carolina Cruz presumió su amor por Farah y terminó con los rumores de una crisis

La presentadora colombiana Carolina Cruz, tras haber terminado  su relación con Lincoln Palomeque, con quien nunca se casó, pero con el que tuvo dos hijos, se volvió a dar una oportunidad en el amor que ha sido muy polémica y ha dado mucho de que hablar, pues los ojos están encima de ellos y muchos no se esperaban que tan pronto pudiera enamorarse. 

Al parecer, la presentadora había mantenido por algunos meses su relación en secreto con el joven piloto Jamil Farah y hace un tiempo, a través de las coincidencias de redes sociales, muchos de sus seguidores lograron confirmar las sospechas de una relación. 

Pero, en los últimos días se regó un rumor que aseguraba que la relación había llegado a su fin. Sin embargo, la modelo y presentadora utilizó una curiosa manera para aclarar la situación. Es que sin necesidad ni de pronunciar palabra ni mucho menos escribir ningún mensaje, aclaró la situación de una manera contundente para detener a quienes hablaban de ella. 

El piloto y la modelo a través de sus historias en su cuenta de Instagram presumieron lo felices que están en su relación, la pareja sin tanto escándalo hizo honor al dicho que dice que “una imagen vale más que mil palabras”. Por su parte, Cruz publicó un par de fotografías en las que aparece con su novio, Jamil Farah. 

En la primera, aparecen los dos mirando la cámara, muy cerca uno del otro y solo se observan los rostros. En la segunda, están los dos abrazados y Carolina le está dando un beso en el cachete a su amor. Una fotografía también quedó en el perfil del piloto que quiso presumir el viaje que hizo con Carolina.

Las publicaciones no tienen ninguna palabra o mensaje, simplemente se presume son la respuesta directa y concreta para acabar con los rumores que estaban tomando fuerza, sobre que su relación estaba en una crisis o que ya había terminado.

Según las imágenes, este puente festivo, la presentadora y modelo estaría pasando unos días en compañía de seres queridos, en lo que parece ser una de las represas cercanas a Bogotá, en medio de la naturaleza fue donde se desconectaron para disfrutar de la compañia del otro.