San Lorenzo, el equipo argentino con 4 colombianos a bordo que espera superar su crisis

San Lorenzo de Almagro, el equipo ´cuervo´ de Argentina, campeón de una Copa Libertadores y campeón de la primera Copa Sudamericana en 2002 al derrotar en los dos partidos de la final al Atlético Nacional, es el equipo del cual el Papa Francisco se declaró hincha, pero parece que por estos días el Cristo se le volteó porque no atraviesa por buenos momentos.

El equipo de Boedo que juega en el Pedro Bidegain o Nuevo Gasómetro y apodado el ciclón, usa camisa a bastones azules y rojos, por eso el Unión Magdalena de Santa Marta, fundado muchos años después que el cuadro gaucho, fue apodado el ciclón, pero para no quedar igual al equipo del sur del continente se le llama el ciclón bananero.

Ciclones argentinos y colombianos tienen en común que hace rato que no soplan, pues mientras el colombiano está en la segunda división, el equipo de los Matadores fundado en 1908 no es campeón desde 2013 en el torneo profesional argentino y desde 2015 en la Copa Argentina.

San Lorenzo de Almagro está en crisis y su ubicación en el torneo es el puesto 25 entre 28 equipos, y su director técnico, Leandro Romagnoli, una de las glorias de la institución como jugador, renunció, pero no fue aceptada su petición de apartarse del cargo y la directiva confía en que pueda comandar al equipo para revertir la situación por la que atraviesa.

San Lorenzo de Almagro es uno de los 5 grandes del fútbol argentino y fue el primer equipo argentino en el que jugó un colombiano, Efraín ´el caimán´ Sánchez, aunque otro colombiano de nacimiento, pero más argentino que el chimichurri, Walter Perazzo, descolló en el equipo santo.

En medio de la crisis, 4 colombianos hacen parte de San Lorenzo de Almagro, siendo el equipo con más nacionales en sus filas, se trata de los defensores Jhojan Romaña y Nicolás Hernández, el volante Carlos ´la roca´ Sánchez y el delantero Diego Herazo.

De los 4 colombianos ha sido Romaña el que más minutos ha jugado, y entre errores y aciertos, al zaguero se le abona su ímpetu, a veces excedido y castigado con tarjetas amarillas y rojas.

San Lorenzo quiere sacudirse de la crisis y por Copa Libertadores recibirá en su estadio al siempre difícil Atlético Mineiro de Brasil dirigido por el argentino Gabriel Milito con la esperanza de levantar el ánimo y obtener una victoria que los guie por la senda ganadora en torneos internacionales y en el campeonato local.