Palmeiras - LDU Quito: Colombia pierde uno de sus representantes para la final de la Copa Libertadores

Lo que se acaba de vivir en São Paulo fue de esos capítulos que quedan para el recuerdo, de esos partidos que uno dice con nombre propiedad: esto es la Copa Libertadores, donde Palmeiras, con toda la furia, le pasó por encima a LDU de Quito y, se metió otra vez en la final.

Sin embargo, ahí también queda el sabor agridulce para nosotros, porque el colombiano Jeison Medina, que tenía medio tiquete listo para la gran cita, terminó viendo cómo la ilusión se deshacía ante ese huracán verde que no tuvo compasión.

Eso sí, tranquilos que no nos quedamos sin bandera en la fiesta, ya que Jorge Carrascal, el cartagenero que creció entre potrero y arena en Los Calamares, estará en la final con Flamengo, para ver si mete magia y deja a Colombia ahí, presente, al menos en la celebración.

Es importante mencionar, desde el principio, que el cuento arrancó con ese 3-0 que LDU traía desde Quito y que dejó a todo el mundo diciendo pensando que la final dejaba de ser brasileña. Pero Palmeiras salió con hambre, con rabia deportiva, con ese aire de “acá en mi casa mando yo”, y a los 20 minutos ya Ramón Sosa mandó a guardar el primero.

Desde ahí, la cabeza empezó a jugar más que las piernas. Y como si fuera poco, antes del descanso, Bruno Fuchs metió el segundo y dejó a la gente al borde del asiento, para un segundo tiempo que fue un solo tenor: Palmeiras encima y LDU de Quito aguantando como podía.

Todo esto hasta que al 68’ apareció Raphael Veiga, el crack del 'Verdao', para igualar la serie con el 3-0. La cosa estaba en penales, el ambiente cortaba el aire, pero cuando un equipo huele sangre, no perdona. Y al 82’, penal. Wilmar Roldán lo pitó sin temblarle la mano, y Veiga lo hizo, otra vez. 4-0. Pandemonio en el Allianz Parque, silencio y caras largas de en LDU de Quito, y Jeison Medina ahí, tragando seco, viendo cómo la gloria de la Libertadores se le escapaba.

¿Cuándo se jugará la final de la Copa Libertadores?

Ahora, la final será un duelo que ya tiene historia y que se repetirá el 29 de noviembre en el Monumental de Lima, con el Flamengo de Carrascal buscando hacer feliz a su gente allá en Cartagena y Palmeiras, con la moral más alta que nunca.