Mayra Ramírez dijo ‘presente’ en la victoria del Chelsea ante el Feyenoord

Luego de la destacada participación de Mayra Ramírez en los Juegos Olímpicos París 2024, donde representó a Colombia con gran desempeño, la artillera nacida en Sibaté regresó a Inglaterra para la pretemporada con el Chelsea. 

Tras su paso por París, Ramírez viajó a Londres para continuar su preparación en el club inglés, y lo hizo de manera espectacular. En su primer partido, el equipo se enfrentó al Feyenoord en un duelo que terminó con una apabullante victoria de 9-0 a favor del Chelsea. 

La colombiana fue protagonista desde el inicio del encuentro, anotando el segundo gol de su equipo a los 7 minutos del primer tiempo. En una jugada en la que quedó sola frente al área rival, la colombiana remató de pierna derecha, colocando el balón hacia el palo de la mano izquierda del portero, quien no pudo detener el disparo.

Este gol y su continua destacada actuación en el Chelsea son fundamentales para que Mayra Ramírez siga sumando puntos en su camino hacia el Balón de Oro. La colombiana ha sido nominada al prestigioso galardón gracias a sus brillantes desempeños tanto con la selección como con su club, y cada partido es una oportunidad para acercarse más al sueño de levantar el trofeo.

Es importante mencionar que la entrega del Balón de Oro 2024 está programada para el 28 de octubre del presente año, y todas las miradas estarán puestas en la ceremonia donde los mejores jugadores del mundo serán reconocidos. 

Esto pues es innegable que su habilidad para generar peligro en el área rival y su capacidad para definir en momentos clave la consolidaron como una de las jugadoras más importantes del mundo, demostrando que su calidad está a la altura de las más grandes del fútbol internacional.

Debido a lo anterior se puede inferir que Mayra Ramírez tiene todas las capacidades para transformarse en la primera colombiana en obtener este prestigioso galardón, un reconocimiento que sin duda estaría a la altura de su gran carrera y que se pone a la par con el adquirido por Linda Caicedo como la mejor jugadora joven del mundo.