Liga BetPlay II: Duván Vergara llegó para marcar goles, no para tomarse fotos

El América de Cali recuperó su mentalidad ganadora y hoy es el equipo que se ubica como segundo en la Liga BetPlay 2024 detrás del Once Caldas que cayó derrotado ante Deportivo Independiente Medellín.

Los diablos rojos volvieron a asustar y aunque los que parecieran asustados fuese ellos en su último juego contra Fortaleza, finalmente lograron salvar los muebles al empatar un partido que parecía perdido gracias a la genialidad de Duván Vergara, hoy la máxima figura del elenco escarlata.

Este jugador, que ya había sido protagonista con el equipo caleño en las conquistas de sus últimas estrellas, retornó al fútbol mexicano para ponerse a las órdenes de Jorge ´el polilla´ da Silva logrando un rendimiento superior al del resto de compañeros, gracias a que se ha convertido en un hombre determinante porque sus goles tienen a la mechita con la clasificación a los cuadrangulares finales muy cercana.

América de Cali ya tiene cara del viejo América de Cali, ese que ganaba y metía miedo, y poco a poco, el equipo ha ido ajustándose a la idea de juego de su director técnico, por eso cada partido es la oportunidad para confirmar un trabajo en equipo, pero también para destacar valores individuales como el de Duván Vergara.

En un campeonato al que llegaron grandes figuras, algunas de las cuales hicieron bastante ruido, Duván Vergara se destaca como el mejor de todos los refuerzos, pues sus actuaciones son bastante sobresalientes y cumple con aquello para lo que se le trajo: marcar goles.

Vergara no solo aporta goles, también trabaja para su equipo, y en el partido ante Fortaleza vio las dos caras de la moneda porque pasó de la tristeza y de la frustración al marrar una pena máxima, a convertirse en el Héroe de su equipo y empatar el partido en el último suspiro.

Con Duván Vergara, el América de Cali respira bien, respira tranquilo y hondo, y espera no tener ninguna fatiga para llegar a los cuadrangulares y demostrar que quiere una nueva estrella para felicidad de su hinchada siempre exigente y ávida de triunfos.