Cristiano Ronaldo escribe otra página dorada: alcanza récord histórico y demuestra su reinado como número uno

Cristiano Ronaldo volvió a demostrar que su vigencia en el fútbol no tiene fecha de caducidad. En la victoria de Portugal sobre Hungría en Budapest, el capitán luso marcó de penalti y alcanzó un registro que parecía inquebrantable: 39 goles en eliminatorias mundialistas, igualando al guatemalteco Carlos ‘Pescadito’ Ruiz como máximo artillero en la historia de esta competencia.

El tanto llegó al minuto 58, cuando Cristiano ejecutó con potencia un penal imposible de detener para el arquero Balász Tóth. Más allá de ser su gol número 943 en el fútbol profesional, el valor simbólico de esta anotación lo coloca en lo más alto de una lista que solo comparten quienes redefinen la historia del deporte.

Un récord que resistió nueve años

Carlos Ruiz había dejado su huella desde 2016, tras su retiro internacional como líder goleador en eliminatorias. El ‘Pescadito’ necesitó 47 encuentros para alcanzar la marca, mientras que Ronaldo lo consiguió en 49.
La ruta más brillante del portugués fue hacia Rusia 2018, donde anotó 15 goles en apenas nueve partidos, superando incluso el mejor registro del guatemalteco.

Ahora, con varios partidos pendientes en esta fase clasificatoria, Cristiano tiene la posibilidad de quedar en solitario como el máximo anotador histórico, un logro que reforzaría aún más su condición de mito viviente.

Portugal se mantiene firme en el Grupo F

El triunfo frente a Hungría, complementado por un gol de Joao Cancelo en la recta final, afianzó a Portugal en la cima de su grupo rumbo al Mundial 2026. La escuadra de Roberto Martínez sigue mostrando regularidad y apunta a sellar su clasificación con anticipación.

Para Cristiano, cada encuentro restante será más que un reto competitivo: será una oportunidad de ampliar un legado que combina longevidad, disciplina y voracidad goleadora.

Con este nuevo logro, Cristiano Ronaldo no solo iguala una marca que parecía imposible, sino que también reafirma su lugar como una leyenda irrepetible en la historia del fútbol. A sus 40 años, el capitán portugués demuestra que la vigencia no tiene fecha de caducidad cuando se trata de talento, disciplina y hambre de gloria. 

Cada gol es una pieza más de un legado que seguirá inspirando a futuras generaciones y que, tarde o temprano, lo dejará en solitario como el máximo goleador de las eliminatorias mundialistas.