Hugo Rodallega 'se rompió': El delantero se lesionó al final del encuentro en Santa Marta

El estadio Sierra Nevada, de la ciudad de Santa Marta, fue el escenario de un auténtico partidazo donde, el ex entrenador de Santa Fe, Harold Rivera, quería amargarle la fiesta al equipo que dirigió a lo largo del primer semestre. De otro lado, el cartagenero Uberth Bodhert, antes entrenador de Alianza Petrolera, llegaba a la capital del Magdalena, con la urgencia de seguir generando confianza en su proceso.

Como curiosidad adicional, en este partido se enfrentarían Harold Rivera padre, cabeza actual del cuerpo técnico samario y Harold Rivera hijo, mediocampista cardenal, además de los más destacados de la Liga, actualmente. Con estos ingredientes, el balón rodó en la bahía más linda de América, en un partido en el que el primer gol cayó apenas a los 15 minutos, gracias a Gustavo Torres, que puso a ganar al equipo local.

El cuadro de Rivera presionaba en la salida del cardenal, generando errores en la salida de este último. El último de ellos el que terminó convirtiéndose en el segundo gol del Ciclón bananero que encontró, en los pies de Ricardo ‘el caballo’ Márquez, el segundo gol del partido, frente a un Santa Fe que no parecía poder responder a la seriedad del equipo samario.

Con el dos a cero y la posterior expulsión de Fabio Delgado, el equipo bogotano se retiró al vestuario en uno de los peores partidos de Santa Fe, desde la llegada de Bodhert, quien acumula críticas por un gran sector de la hinchada, que no creen en el proceso del ex Once Caldas. Para el inicio de la segunda parte, Bodhert puso en el terreno de juego a Hugo Rodallega, Iván Rojas y Jersson González.

El cambio del cuadro cardenal fue rotundo y, apenas en el minuto 47 ya había logrado comenzar la remontada, con golazo de Jersson González, que llegó gracias a la asistencia de Hugo Rodallega. El balón y las oportunidades eran a favor del primer campeón y, sobre el minuto 67 y luego de un rebote que Ramiro Sánchez no pudo controlar, llegó el gol de Rodallega, que significaba el empate para el león, que no parecía que tuviera un jugador menos.

El tiempo fue avanzando y mostró a dos equipos ya con cierto cansancio, intentaron buscar el gol del desequilibrio, aunque ninguno de los dos parecía ya tener el combustible para ir por la victoria. El cronómetro fue arrastrando al partido a los últimos momentos y, tras 5 minutos de adición, el central no tuvo más que señalar el final del encuentro, dejando la conmovedora imagen de un Rodallega que, tras hacer la señal de ruptura, y cojeando, rompió en llanto.