Francia se instaló en semifinales, en un partidazo frente a Inglaterra
Tchouamení y Giroud marcaron para Francia. Harry Kane lo empató de penal y después pudo volverlo a empatar desde la misma instancia, pero falló. Marruecos - Francia la otra semifinal.
Tchouamení y Giroud marcaron para Francia. Harry Kane lo empató de penal y después pudo volverlo a empatar desde la misma instancia, pero falló. Marruecos - Francia la otra semifinal.
Llega el cierre de los cuartos de final. A primera hora, y de manera sorprendente, la selección de Marruecos entró directamente a la historia como el primer equipo africano que pisa las semifinales de una Copa del Mundo. Un solo gol fue suficiente para pasar a la historia y, además, dejar atrás al equipo de Cristiano Ronaldo, que se retiró a los vestuarios en medio del llanto.
En el segundo turno saltaron al campo Inglaterra y Francia. Por primera vez en la historia, británicos y galos se encontraban en una fase de eliminatoria del mundial. Aquí, uno de los dos tendrá que devolverse a su casa con las manos vacías. Se vieron las caras en dos oportunidades, ambas en fase de grupos y ambas con resultado a favor para los de la cruz de San Jorge.
Los primeros minutos en Al Bayt fueron de reconocimiento, con un par de llegadas francesas bien controladas por la saga inglesa. El balón, en los primeros 12 minutos, fue en su mayoría de los dirigidos por Deschamps, mientras que los de Southgate esperaban el contragolpe.
Inglaterra daba ventajas y, al minuto 17, luego de una llegada comandada por Killian Mbapé que toca con Griezmann y arrastra la marca de Maguire. Griezmann toca con Tchouaméni que, al mejor estilo de Paul Pogba, calcula y la manda al fondo para poner a ganar a Francia. Kane tuvo el empate un par de minutos después, pero se encontró con una buena actuación de Lloris, que lo evitó.
Al 29 pudo llegar el empate del equipo inglés, a través de Harry Kane, pero de nuevo se encontró con Lloris. Inglaterra llegaba con peligro y Francia se defendía con uñas y dientes. Por delante aún 15 minutos, que se harían eternos para los seguidores de Francia. Con el pasar de los minutos Inglaterra bajó el ritmo y Francia pudo controlar más y volver a llegar al área de Pickford, no pudiendo aumentar el marcador. Sin tiempo para mucho más, tras 5 minutos de adición la primera mitad llegaba al final.
Apenas sobre un minuto de iniciado el segundo tiempo, Bellingham tendría la primera opción para Inglaterra, pero una vez más, Hugo Lloris, el portero al servicio del Tottenham inglés, negaba el gol a los de Bretaña. Inglaterra iniciaba con todo y era un milagro que el partido se mantuviera a favor de los galos.
Inglaterra presionaba y una jugada al borde del área de Lloris, terminó en penalti que cobró Harry Kane. Así, los dos compañeros del Tottenham se enfrentaban “en singular combate”, como escribiría Homero. El duelo lo ganó el inglés, que marcó el empate para los de Southgate. En la siguiente jugada Pickford salvó a su equipo del que era el segundo para Francia.
Apenas un minuto después, un desborde de Mbappé casi termina en el fondo del arco de Pickford, pero Dembelé se demoró en la definición. Casi una hora de partido y era prohibido pestañear. Al 70 lo tuvo, quién lo diría, Harry Maguire de cabeza, pero se fue rosando el poste. Inglaterra insistía y volvió a llegar apenas un minuto después, pero Saka no la esperaba y no pudo definir bien.
A los 77 despertó el cuadro galo, con un centro de Dembelé que se encontró Olivier Giroud que remató fuerte, pero Pickford negó el tanto. Francia siguió encima y, apenas un minuto después, un nuevo centro de Antoine Griezmann que cabecea el mismo Giroud, esta vez ganando el duelo frente al portero del Everton. Faltando 10 minutos, Francia se ponía adelante y parecía que se metía a semifinales.
Sólo habían pasado 3 minutos del gol cuando, en una jugada de peligro de Inglaterra, Theo Hernández empujó a Mason Mount en el área. El VAR revisó y el central dio penalti para Inglaterra. De nuevo, el duelo Kane – Lloris se repetía, esta vez sobre el 84. El delantero del Tottenham disparó con fuerza, con tan mala suerte que el balón se fue arriba. El marcador no se movió y los hinchas franceses estaban al borde del infarto.
Sampaio, el central, les dio a los ingleses 8 minutos más de vida. Era el todo o nada, con un Inglaterra presionando y un Francia que buscaba recuperar el balón para descansar con base en su posesión. Esos últimos minutos se jugaron, casi en su totalidad, en el campo francés. Los de Deschamps de nuevo se defendían con entereza. La última del partido la tuvo Marcus Rshford, en pelota quieta. Un cobro sensacional que se fue apenas desviado. Era todo. El campeón defensor volvía a semifinales 4 años después.