Heces con sangre en mascotas: las enfermedades que revela este síntoma

El cuerpo de los seres vivos, ya sea de los humanos, de las plantas o de los animales, es muy sabio y funciona de forma mecánica, por ello, cuando algo no anda bien envía señales. En las mascotas, las enfermedades suelen manifestarse a través de síntomas como la pérdida de apetito y energía, los dolores, la inflamación e incluso una apariencia extraña en la orina o las heces. 

Uno de los signos de alarma es la aparición de sangre en el excremento, que puede significar que nuestro peludo tiene algún padecimiento estomacal o enfermedad. Ante este signo, es fundamental acudir con un veterinario especializado; sin embargo, a continuación te compartimos algunas de las razones por las que puede aparecer este síntoma. 

De acuerdo con el Hospital Veterinario del Siglo XXI, lo primero que debemos hacer si observamos sangre en las heces de nuestro animal de compañía es analizar su color y consistencia, ya que esto “nos puede orientar sobre dónde se encuentra localizada la patología del animal”. 

Los expertos señalan que si la sangre está fresca y es de color rojo, significa que la afección proviene del tracto digestivo inferior, conformado por el recto, el colon y las glándulas anales. 

En este caso, puede que el animal tenga parásitos intestinales o se haya visto afectado por un cambio en la dieta. La sangre de este tono también puede aparecer por desgarros o heridas en el tracto digestivo y por heridas o fístulas en las glándulas anales.

Por otro lado, si la sangre es de color oscuro, puede significar que existen enfermedades más serias como tumores, hemorragias en boca, esófago o estómago, úlceras en el estómago o algún tipo de intoxicación por consumo de veneno. 

Según profesionales del Hospital Veterinario Menes, es importante llevar a nuestra mascota a revisión con un profesional ante cualquier cambio en las heces, ya que esto puede prevenir complicaciones. 

Entre las recomendaciones para evitar las enfermedades gastrointestinales en mascotas están: fortalecer su flora intestinal con probióticos, cumplir con el calendario de vacunas y de desparasitación y brindarles una dieta adecuada que incluya alimentos ricos en fibra, potasio y sodio.