Conoce la historia de Waldi, la primera mascota oficial de los Juegos Olímpicos
Un perro salchicha fue quien inspiró la primera mascota oficial de los Juegos Olímpicos en 1972.

Un perro salchicha fue quien inspiró la primera mascota oficial de los Juegos Olímpicos en 1972.
Los Juegos Olímpicos, uno de los eventos deportivos más importantes a nivel mundial, tuvieron su primera edición en 1896, en Atenas, Grecia; sin embargo, no fue hasta 1972 que crearon su primera mascota oficial, la cual resultó ser todo un éxito.
Se trata de Waldi, un perro salchicha multicolor inspirado en Cherie von Birkenhof, mascota de Félix Lévitan, el entonces presidente de la Asociación Internacional de la Prensa Deportiva. Este canino no fue elegido al azar, en realidad representaba la amistad, lealtad y entusiasmo, valores fundamentales del espíritu olímpico.
Waldi fue creada por la diseñadora alemana Elena Winschermann, el 15 de diciembre de 1969, en una fiesta navideña del Comité Organizador de los Juegos de Múnich. La ternura que irradiaba dejó impresionados a muchos.
Durante la reunión, les fueron entregados a los múltiples asistentes hojas de papel y lápices de colores para que dibujaran a su mascota ideal para el evento deportivo. El diseño de Winschermann resultó el ganador recibiendo muchos elogios.
Esta primera mascota de los Juegos Olímpicos, además de ser un animal insignia en el estado Alemán de Baviera, poseía los colores verde, azul y amarillo. Su cabeza y patas eran de color azul y su tronco estaba diseñado con franjas verdes y amarillas.
Pero más allá de ser un simple perro, su cuerpo tenía un significado particular respecto a la ruta de la maratón de 1972: la cabeza estaba orientada hacia el oeste y el recorrido iniciaba en el cuello en el sentido contrario a las manecillas del reloj.
Los colores de Waldi representaban además, la diversidad y la unión de los pueblos que se congregaron aquel año en Múnich para celebrar el gran evento deportivo.La fama que alcanzó este perro salchicha fue tanta, que su imagen fue replicada en múltiples productos oficiales como peluches, llaveros, carteles, sellos conmemorativos y camisetas.
A partir de entonces, cada ciudad anfitriona de los juegos olímpicos ha sido responsable de diseñar su propia mascota, reflejando su cultura y valores característicos. Algunas mascotas insignia destacadas han sido el oso Misha de Moscú 1980, el tigre Hodori de Seúl 1988, Cobi de Barcelona en 1992 y Wenlock y Mandeville en Londres 2012.