San Feliciano: poderosa oración para ganar la lotería

San Feliciano es uno de los mártires más venerados por la Iglesia Católica por su firmeza en la fe a pesar de las adversidades. Su historia se remonta al siglo III, cuando hubo una gran persecución a los cristianos por parte del Imperio Romano.

Este hombre se convirtió en ejemplo de valentía para los cristianos de su época, pues a pesar de ser arrestado y torturado por profesar la fe y la existencia de Dios, nunca renunció a sus creencias en Jesucristo.

Desde muy joven demostró un gran amor por la religión, tanto así que a los 18 años se ordenó sacerdote. Tiempo después, se convirtió en obispo, pero fue martirizado y asesinado por el emperador Diocleciano a muy temprana edad. 

La fiesta de San Feliciano martir se celebra el 29 de octubre, día en que los fieles se encomiendan a él para pedir favores, entre estos, ganar la lotería. A continuación te compartimos un poderoso rezo para este fin. 

Antes de hacer esta oración del portal ‘Oraciones y Conjuros Poderosos’, se recomienda comprar un billete de lotería, encomendarlo a San Feliciano y ofrecerlo para su custodia. Lo ideal es que lo guardes junto a su imagen, ya sea en porcelana o estampita, hasta el día del sorteo.

Oración a San Feliciano Martir 

Glorioso mártir San Feliciano,
que estás a la diestra de Dios,
por tu valor y buenas obras,
tráeme fortuna y felicidad.
 
A ti, te encomiendo este boleto de lotería,
para que sea impregnado de buena suerte
y su número salga premiado
en el sorteo del día (mencionar la fecha)
 
Tu mejor que nadie sabes
mis dificultades y problemas económicos,
y esta manera es la única
en la que puedo encontrar una solución para resolverlos,
y poder continuar una vida feliz y sin estrecheces.
 
San Feliciano bendito,
tu que a todos tus devotos les procuras
mejoras, bienestar y felicidad,
escucha mi ruego y ayúdame,
pues esta petición te la hago por necesidad,
no por avaricia ni vicio.
 
Haz que obtenga el beneficio del azar,
y yo te prometo ayudar con caridad
a quién lo necesite como yo.
 
Gracias por escuchar mi súplica. Amén