Por: Jessica Mutis • Colombia.com

Consejos para el buen uso de la tecnología en niños y adolescentes

La era tecnológica, no solo ha marcado un hito en la historia con sus avances, sino que en esta época se ha apoderado del diario vivir de cada persona. Se considera según expertos que, a partir de los 7 años, el 90% de los niños ya cuenta con un dispositivo con acceso a internet, motivo por el cual es indispensable saber poner límites ante este fenómeno.

En niños menores de dos años no se deben usar pantallas. Foto: Shutterstock
En niños menores de dos años no se deben usar pantallas. Foto: Shutterstock

La era tecnológica, no solo ha marcado un hito en la historia con sus avances, sino que en esta época se ha apoderado del diario vivir de cada persona. Se considera según expertos que, a partir de los 7 años, el 90% de los niños ya cuenta con un dispositivo con acceso a internet, motivo por el cual es indispensable saber poner límites ante este fenómeno.

Las opiniones acerca de este uso, están encontradas. Pues bien, hay material y aplicaciones que brindan un amplio conocimiento, el tiempo es un detonante si se excede. Existen síntomas típicos cuando un niño se ha vuelto adicto o dependiente del uso de las mismas, bien sea por un juego en específico, serie o contenido que genere tranquilidad y menor esfuerzo por lo que su cuerpo y mente se relajan y generan la sensación de necesidad. 

Las consecuencias típicas son, irritabilidad, ansiedad, falta de atención, trastornos en el lenguaje, afectación directa al desarrollo de la creatividad, problemas para la comprensión y lectura de textos a largo plazo. Es por ello que se debe limitar el uso, los niños menores de dos años no deberían estar expuestos a ningún tipo de pantalla, mientras que de ahí en adelante se recomienda de 1 a 2 horas máximo. 

De acuerdo a la doctora Maribel Andrés, responsable del servicio de neurofisiología del Hospital Vithas Castellón de España, «Las pantallas iluminadas tienen mucho contenido de luz azul, algo que dificulta la conciliación del sueño afectando ciertas células de la retina que son muy sensibles a los tonos azulados y son precisamente las que influyen más en el ritmo de secreción de melatonina (hormona que regula nuestro reloj biológico).

•  Poner límites: Llegar a acuerdos con los niños, darle prioridad a actividades donde ellos se muevan, ejerciten y tenga la oportunidad de reforzar sus habilidades finas y motrices. Seguidamente, se debe anticipar el uso de las tecnologías llegando a acuerdos o especificando el tiempo que se debe usar, como aliado se puede usar un reloj de arena o especificar en el reloj convencional cuantos minutos son de manera fácil. 

• Restringir: Se debe saber y tener en cuenta que estos dispositivos, no deben interferir en los momentos cotidianos o de relación social, como lo es el momento de comer, dialogar en familia o al finalizar el día para que no interfiera con la hora de dormir. Los niños necesitan de las interacciones sociales al igual que cualquier ser humano.

• No usarla como un sustituto emocional: de acuerdo a la Asociación Americana de Pediatría, Los medios digitales pueden ser muy eficaces para mantener a los niños calmados y callados, pero no debe ser la única forma que utilicen para aprender a calmarse. Se les debe enseñar a los niños a cómo identificar y controlar las emociones fuertes, ocurrírseles actividades para controlar el aburrimiento, o para calmarse usando técnicas de respiración, a hablar de maneras para solucionar problemas, y encontrar otras estrategias para canalizar las emociones. 

•  Ser ejemplo: El tiempo de calidad con sus hijos debe ser una regla en su diario vivir, recuerde que los niños suelen imitarnos, es por ello que no está demás apartar también un poco los dispositivos un rato y prestarles atención, o bien compartir con ellos en sus dispositivos, para que sientan nuestra compañía

• Advertir sobre los riesgos: Aunque es ideal que el padre esté atento al tipo de contenido que consumen sus hijos, no está de más hablar sobre los contenidos explícitos, o personas mal intencionadas que están en ese medio, para así lograr prevenir abusos y evitar que sean blanco de situaciones o acoso cibernético.

Para la experta y psicóloga clínica Catherine Steiner-Adair, los niños tienen que saber que la vida es atractiva fuera de la pantalla. “Es sano sentir curiosidad por otras personas, aprender a escuchar. Esto les enseña sobre la inteligencia social y emocional, indispensables para alcanzar el éxito en la vida”.