Anuncian comercialización de una rueda que no se pincha basada en desarrollos de la Nasa

Esta idea, surgió de la implementación en 2017 de los neumáticos superelásticos capaces de adaptarse al entorno que llevó el Perseverance de la Nasa y que cuentan con la característica de que no se pueden pinchar. Las llantas vuelven a su forma después de deformarse. La empresa encargada de comercializar esta invención sería una start up norteamericana The Smart Tire Company, quienes colaboran con la NASA para lograr traerle a la humanidad ciertos desarrollos usados en el Espacio.

Entre tanto, el anuncio de la comercialización y la apertura de pedidos se dio en el marco del CES 2023 en las Vegas, por parte de la compañía. METL (Martensite Elasticized Tubular Loading), es el nombre del neumático que es realmente indestructible, tal como lo exigen las condiciones de Marte para los vehículos que son usados allí.

La base de compuestos con la que ha sido creada, son níquel y titanio: el NiTinol, material que al no tener aire permite avanzar evitando pinchazos, además, cuenta con cierta memoria que hace, señala Xataka que se reorganice su estructura molecular cuando se deforma para recuperar su forma original al instante, así como cuando se dobla, es también sólido, sin cámara de aire en su interior, y con una resistencia similar a la del titanio.

La compañía señala, que el material es válido para bicicletas de carretera, pero que también puede implementarse en bicicletas de montaña, eléctricas y de todo tipo. Cabe mencionar que contará para su adecuación con una de banda de rodadura de goma la cual, si puede tener desgaste y por ende requeriría cambio, pero, es la que mejorará el agarre de la rueda al suelo, la ventaja es que es de bajo costo.

En consecuencia, detalla motor pasión la empresa va a empezar a comercializar la llanta desde ya bajo un precio de unos 140 euros por unidad para bicicletas. Y tras el anuncio ya tienen lista de espera. Así mismo se espera que llegue a los ciclomotores y coches eléctricos, en un futuro. Por otra parte, también a los vehículos claro está que tendría que pasar por unas amplias pruebas, procesos, regulaciones y aceptaciones, suponiendo así una rivalidad a la industria de los neumáticos.