Por: Redacción Tecnología • Colombia.com

La historia del Duende del Columpio: un espíritu "juguetón" que siempre va tras los niños

El Duende del Columpio, es un espíritu 'jugueton' que siempre va tras los niños, que se acercan a su lugar "favorito"

Actualización
Los niños se sentían observados "por algo" y un día, le tiraron "piedritas" para que se fueran. Foto: Twitter @Roberto55772188
Los niños se sentían observados "por algo" y un día, le tiraron "piedritas" para que se fueran. Foto: Twitter @Roberto55772188

El Duende del Columpio, es un espíritu 'jugueton' que siempre va tras los niños, que se acercan a su lugar "favorito"

"No puedes jugar ahí", le decía una mujer a su pequeña niña, la historia es que en un columpio siempre llega un "espíritu juguetón" que ha sido la leyenda detrás de varios niños asustados. 

Según detallan los medios especializados, todo esto ocurre en Veracruz, en una pequeña localidad del Álamo Temapache, donde varios niños han sido "espantados" del columpio. 

El relato reconocido por la comunidad, es que hace muchos años atrás, en el Álamo había mucha vegetación y caudales naturales, pocas personas vivían por allí, una familia con hijos, decidió instalar un columpio rústico para que tuvieran donde jugar. 

Los niños de la familia, eran dos niñas y un niño, y adoraban que el padre hubiera construído, con una tabla y un lazo, el rústico juguete que le permitió risas y buenos momentos en el patio de la casa.

La mamá empezó a notar que la niña decía que sentía "piedritas", como si sus hermanos se las lanzaran, por los que les dijo "no pueden jugar ahí, hasta tan tarde. Los duendes están celosos". 

Aunque no lo vieron nunca, sí sentían que eran observados "por algo", pero mientras más se divertían, más se sentían amenazados, uno de los niños, aparecía "arañado" cuando intentaba regresar las piedras que le "tiraban a la hermana". 

Los duendes siempre han sido identificados con los niños, algunos son buenos y bondadosos, pero hay otros, como en este caso, que "reaccionan contra los niños", en Colombia, se ha escuchado de casos que muerden, arañan y raptan a los "pequeños".