Ámsterdam implementa regulaciones para brindar una mejor experiencia a los turistas

Viajar es la parte favorita de muchas personas, conocer destinos turísticos, llenar su pasaporte y llevarse varias experiencias hace parte de los mejores momentos para familias y amigos o incluso para aquellos que les agrada viajar solos.

Existen algunos destinos que pueden traer todo tipo de experiencias, desde buenas a malas, por factores de cultura, comida, tradiciones, sanidad o exceso de turistas. Según el Consejo Mundial de Viajes y Turismo, se espera que el sector recaude $ 9,5 billones de dólares en 2023, un 95% más que antes de la pandemia.

Algunos destinos llevan años siendo los más turísticos, lo cual brinda beneficios a la industria hotelera y empresarial, pero a su vez se suma algunos factores negativos como el exceso de ruido, el tráfico y las aglomeraciones, causando molestias a los residentes y malos ratos a algunos turistas. Por estas razones, ciertos destinos han optado por imponer algunas reglas para regular este tipo de situaciones, entre ellas los impuestos turísticos nuevos o incrementados, campañas para disuadir a los visitantes problemáticos y límites de asistencia a las atracciones más populares.

Sin embargo, según una encuesta de Booking realizada en el 2022 entre los turistas encuestados, el 64% afirmaron que estarían dispuestos a mantenerse alejados de los lugares turísticos más concurridos para evitar aglomeraciones. Y el 31% dijo que incluso estaría dispuesto a elegir una alternativa a su destino preferido para ayudar a evitar la saturación.

Entre los destinos que resaltaron como los peores destinos del 2023 se encuentra Ámsterdam, donde muchos viajeros catalogaron a los jóvenes y como “turistas molestos” en especial por el tema de alcohol y drogas, ya que esta ciudad está asociada al alto consumo de estos factores.

Por esta razón, se creó una campaña para atraer el turismo y cambiar el aspecto de esta ciudad y del conocido barrio rojo. En 2021 se puso en marcha una ordenanza llamada “Turismo de Ámsterdam en equilibrio”, que establece que cuando el número de visitantes que pernoctan alcanza los 18 millones, el ayuntamiento está “obligado a intervenir”.

Desde entonces, las autoridades han prohibido varias actividades que antes eran normales en esta ciudad, como consumir cannabis en las calles o beber. Ahora, los visitantes que lleguen durante el día a Ámsterdam deberán pagar una tasa de €8 a €11 euros, es decir, de $33.000 a $46.000 pesos colombianos, y para aquellos que visiten en la noche, pagarán la tasa nocturna incorporada a los precios de las habitaciones de hotel, la cual subirá al 12,5% del precio de la habitación.

Pese a estas restricciones, se espera que en el 2024 la ciudad siga recibiendo un amplio número de turistas.