Quibdó

Ciudad en Quibdó - ShutterStock

Ciudad en Quibdó - ShutterStock

UNA LLUVIA DE ALEGRÍA Y NATURALEZA

Si el cielo es gris y se avecina un aguacero, pero por arte de magia desaparecen las nubes y el sol con sus rayos y calor comienza a hacer de las suyas en las pieles de quienes están ahí abajo, justo frente al Atrato, entonces usted está en Quibdó. Luego y después de un atronador rayo comienza a caer la lluvia, una que pueda ser fina u otra que sencillamente puede parecer interminable para quien no sabe nada de aguaceros en esta, la capital del departamento del Chocó.

Es que aquí en el segundo lugar más lluvioso del planeta, el agua es el motor de la vida de la ciudad, nadie detiene su marcha porque llueve, truene o relampaguee; Quibdó no para.

Chocó y Quibdó son un hermoso juego de palabras con total relación indígena, esa melodía que recorre sus anchos y caudalosos ríos, sus selvas inmensas y ricas y que se notan en el habla de sus habitantes. Quibdó suena y quiere hacerse oír en todo el mundo.

El río Atrato, uno de los de mayor caudal en el mundo vigila y dirige la vida de esta ciudad que goza, ríe y sueña con un futuro próspero en medio de una naturaleza que le fue entregada como regalo de Dios y que asombra al mundo por su biodiversidad.

Barcos en el Río atrato en la ciudad de Quibdó en el Chocó - ShutterStock

Barcos en el Río atrato en la ciudad de Quibdó en el Chocó - ShutterStock

Quibdó vive la vida a su manera, aquí la alegría se hace notar porque este sentimiento no merece ser tratado con notas medias y los afrocolombianos, grupo étnico mayoritario de la región, sí que saben gozar. La capital chocoana es un interesante destino del turismo en Colombia que se convierte es un lugar muy promocionado en los últimos años y que invita a colombianos y extranjeros a gozar de su magia, de su hospitalidad y cariño.

El Malecón sobre el río Atrato es un lugar que no puede dejar de visitarse, ver la caída de la tarde sobre la rivera es un espectáculo hermoso que reconcilia el espíritu con la naturaleza y que abre la conciencia sobre la importancia de conservar la naturaleza como algo sagrado porque es la manifestación universal de la vida. Quibdó tiene una gran importancia por ser el punto de partida hacia otros santuarios del turismo, desde aquí se puede llegar a los Parques nacionales naturales de mayor biodiversidad del país y del mundo, entre ellos están el Parque Nacional Natural de Los Katíos y el Parque Nacional Natural Ensenada de Utría, emblemas de la riqueza chocoana y con orgullo mostrados a todos los visitantes amantes de la naturaleza.

Parque Natural en Quibdó - ShutterStock

Parque Natural en Quibdó - ShutterStock

Quibdó suena a chirimía, a polka, mazurca y currulao, Quibdó es la alegría heredada de los africanos y que mezclada con el gusto indígena crea aires para que el cuerpo jamás deje de moverse durante los 20 días de fiesta, sí señores, leyeron bien, 20 días de fiesta que traen las festividades de San Pacho en homenaje a San Francisco de Asís, patrono de la ciudad.

Quibdó es verde surcada por majestuosos ríos, es la alegría que brota por los poros de grandes y chicos que ven un camino promisorio en medio de la más grande biodiversidad. Quibdó es una tormenta de optimismo que no tiene fin.