Complementos nutricionales: ¿por qué y para qué?

Seguramente te has topado, en alguna farmacia o herbolario, con los complementos alimenticios, ¿a quién están dirigidos y para qué sirven?

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Seguramente te has topado, en alguna farmacia o herbolario, con los complementos alimenticios, ¿a quién están dirigidos y para qué sirven?

Los complementos alimenticios o nutricionales son infinitos y su composición difiere según la persona a la que vayan dirigidos.

Estás embarazada o planeas estarlo

Estás embarazada y para cualquier futura mamá es importante contar con una cantidad suficiente de vitamina B9 o ácido fólico tanto en el momento de concebir como a lo largo del embarazo para limitar el riesgo de malformaciones en el bebé. Una déficit de vitamina B9 en las primeras semanas de embazado puede provocar en el feto “anomalías del tubo neural” responsables de daños normalmente irreversibles.

Por eso se recomienda aumentar, de manera sistemática a lo largo del embarazo, los aportes de ácido fólico mediante una alimentación rica en hortalizas frescas y cereales, o a través de complementos. Si planeas quedarte embarazada habla con tu ginecólogo para que en función de tu estilo de vida, tus hábitos alimenticios y tus antecedentes pueda prescribirte ácido fólico.

Sientes cansancio
¿Quién no ha pensado en echar mano de un complemento antes de un examen o de la entrega importante de un trabajo? Muchos suplementos contienen cafeína, ginseng, guaraná o vitamina C para dar energía. Si tu cansancio persiste, por ejemplo al final del invierno, entonces puedes echar mano del omega 3, que ayuda a resistir mejor el estrés y las oscilaciones anímicas. Una cura de antioxidantes también es útil.

Quieres mantenerte joven
No busques más; no existe ninguna píldora milagrosa para este propósito. Sin embargo, existen complementos antiedad a base de antioxidantes como las vitaminas A, E y C y el selenio. Estos compuestos permiten luchar contra el exceso de radicales libres, moléculas que en demasía producen una degradación celular responsable del envejecimiento cutáneo.

Quieres ponerte a dieta
Son numerosos los complementos alimenticios que favorecen la pérdida de peso, lo cual no significa que reemplacen una alimentación adaptada ni el ejercicio físico.

Fumas

Además de aumentar los riesgos asociados a numerosas patologías, el tabaco disminuye la concentración de antioxidantes, moléculas que protegen de los efectos nefastos de los radicales libres. Existen muchos complementos nutricionales a base de antioxidantes dirigidos a los adictos a la nicotina. Pero la mejor manera de preservar la salud es, por supuesto, ¡dejar de fumar!

Te acercas a la menopausia

Existen muchos complementos alimenticios destinados a luchar contra los efectos de la menopausia; la mayoría son a base de fitoestrógenos, esencialmente isoflavonas de la soja, que son hormonas vegetales cuya función es reemplazar los estrógenos femeninos. Las isoflavonas son, teóricamente, eficaces contra los sofocos de calor y la pérdida de masa ósea.

Eres deportista

El problema del deportista es no tomar complementos que se consideren sustancias dopantes. El suplemento más conocido es la creatina. Esta sustancia la fabrica el organismo de manera natural y se cree aumenta la resistencia al esfuerzo y la masa muscular. El Comité Olímpico Internacional la permite.