Gimnasia ocular para los ojos cansados y mirada triste
Los ejercicios faciales constituyen un medio natural y completamente gratuito de prevenir el envejecimiento y de rejuvenecer las líneas de la cara.

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Los ejercicios faciales constituyen un medio natural y completamente gratuito de prevenir el envejecimiento y de rejuvenecer las líneas de la cara.
Mejora la circulación sanguínea y acaban con los rostros tristes. Si practicas regularmente, la gimnasia facial de los ojos es eficaz y su efecto sobre la luminosidad de la mirada es perceptible al poco tiempo.
Los siguientes ejercicios estimulan la circulación sanguínea del contorno de ojos y fortifican los músculos de los párpados. Agrandan los ojos, aportan luminosidad a la mirada y reducen visiblemente las bolsas y las ojeras bajo el ojo.
Coloca en los extremos internos y externos de cada ojo los dedos corazón en índice de cada mano.
Ejerce presión en los extremos internos y externos de los ojos, que deben estar abiertos y empuja, el párpado interno hacia arriba lo máximo posible. El esfuerzo ocasiona que la piel tiemble bajo los dedos.
Relaja y vuelve a comenzar el ejercicio alternando 10 contracciones y 10 relajaciones.
Coloca únicamente los dedos índice en los extremos externos de los ojos y cierra los ojos presionando con fuerza los párpados. Cuenta hasta 20 sintiendo las vibraciones en los extremos externos.
Relajar. Repetir 3 veces este ejercicio en 2 tiempos.
Abre los ojos lo máximo posible. Mantén la posición durante varios segundos y relaja la tensión. Si tienes los párpados caídos, realiza el mismo ejercicio contrayendo al mismo tiempo el músculo que rodea los ojos.
Los siguientes ejercicios estimulan la circulación sanguínea del contorno de ojos y fortifican los músculos de los párpados. Agrandan los ojos, aportan luminosidad a la mirada y reducen visiblemente las bolsas y las ojeras bajo el ojo.
Coloca en los extremos internos y externos de cada ojo los dedos corazón en índice de cada mano.
Ejerce presión en los extremos internos y externos de los ojos, que deben estar abiertos y empuja, el párpado interno hacia arriba lo máximo posible. El esfuerzo ocasiona que la piel tiemble bajo los dedos.
Relaja y vuelve a comenzar el ejercicio alternando 10 contracciones y 10 relajaciones.
Coloca únicamente los dedos índice en los extremos externos de los ojos y cierra los ojos presionando con fuerza los párpados. Cuenta hasta 20 sintiendo las vibraciones en los extremos externos.
Relajar. Repetir 3 veces este ejercicio en 2 tiempos.
Abre los ojos lo máximo posible. Mantén la posición durante varios segundos y relaja la tensión. Si tienes los párpados caídos, realiza el mismo ejercicio contrayendo al mismo tiempo el músculo que rodea los ojos.
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