Por: Alexandra Méndez • Colombia.com

Oración por la Asunción de la Virgen María al cielo: reza para recuperar la fe

Reza esta poderosa oración para conmemorar el glorioso día en que la madre de Jesús subió al cielo para acompañarlo por la eternidad. 

Oración por la Asunción de la Virgen María al cielo. Foto: Shutterstock
Oración por la Asunción de la Virgen María al cielo. Foto: Shutterstock

Reza esta poderosa oración para conmemorar el glorioso día en que la madre de Jesús subió al cielo para acompañarlo por la eternidad. 

El pasado 15 de agosto, la iglesia católica liderada en la tierra por el sumo pontífice el papa Francisco, festejó la asunción de la Virgen María al cielo en cuerpo y espíritu tras su muerte para interceder por nosotros ante Dios. 

Según la Biblia, al final de su vida, el cuerpo de la madre de Jesús no pasó por el proceso natural de decadencia y descomposición al igual que todos los seres humanos, sino que fue “asumido” en el cielo y reunido con su alma para la eternidad.

Según la web Píldoras de fe, esta celebración es considerada como la principal fiesta de la Virgen Madre. En Colombia se festejará este año el lunes 19 de agosto, por lo que a continuación te compartimos una poderosa oración del Vaticano para que conmemores a la Virgen María y recuperes o fortalezcas tu fe en ella. 

Oración a María Asunta

Oh María Inmaculada Asunta al cielo,
tú que vives bienaventurada en la visión de Dios:
de Dios Padre que te hizo alta criatura, de Dios Hijo que quiso
ser generado como hombre por ti y tenerte como madre,
de Dios Espíritu Santo que en ti realizó la concepción humana del Salvador.
Oh María purísima,
Oh María dulcísima y bellísima,
Oh María, mujer fuerte y reflexiva.
Oh María, pobre y dolorosa,
María, virgen y madre,
mujer humanísima como Eva, más que Eva;
cercana a Dios en tu gracia, en tus privilegios,
en tus misterios,
en tu misión, en tu gloria.
Oh María asunta a la gloria de Cristo en la perfección completa
y transfigurada de nuestra naturaleza humana.
Oh María, puerta del cielo,
espejo de la Luz divina,
santuario de la Alianza entre Dios y los hombres,
deja que nuestras almas vuelen tras de ti
deja que se eleven tras tu radiante camino
transportadas por una esperanza que el mundo no tiene, la de la dicha eterna.
Consuélanos desde el cielo, oh Madre misericordiosa,
y por tus caminos de pureza y esperanza guíanos un día al encuentro feliz contigo
y con tu divino Hijo nuestro Salvador Jesús. ¡Amén!