Por: Redacción Vida y Estilo • Colombia.com

Oración a San Bonifacio para fortalecer la fe y el amor a Dios

Si lo que deseas es mantener siempre viva tu fe, y aumentar y demostrar todo el amor que sientes por Dios, pide la intercesión de San Bonifacio con una poderosa oración.

Oración para fortalecer la fe: reza para aumentar y demostrar el amor a Dios. Foto: Shutterstock
Oración para fortalecer la fe: reza para aumentar y demostrar el amor a Dios. Foto: Shutterstock

Si lo que deseas es mantener siempre viva tu fe, y aumentar y demostrar todo el amor que sientes por Dios, pide la intercesión de San Bonifacio con una poderosa oración.

San Bonifacio, conocido también como ‘el apóstol de Alemania’, es conmemorado cada 05 de junio; se encargó de difundir la Palabra de Dios por diferentes lugares, bautizó numerosos paganos y murió como mártir defendiendo sus creencias; por ende, si lo que quieres es fortalecer tu fe y aumentar el amor hacia Dios, para demostrar así tus intenciones de servirle eternamente, puedes encomendarte a este santo, solicitando su intercesión con esta oración que te enseñamos a continuación, compartida por el portal ‘Oración en Puntadas’.

Oración para fortalecer la fe y el amor a Dios

Querido San Bonifacio, tú que desde tu tierna infancia te apasionaste por las cosas de Cristo, pide a Dios aumente mi amor por Él. Tú que quisiste ser siempre monje, y terminaste siendo Obispo, pide a Dios aumente mi humildad. Tú que fuiste mártir y no perdiste la alegría, dile al Señor que me dé la Gracia de mantener la alegría en la prueba, el Espíritu de Dios en la adversidad.

Tú que en tú vida, hiciste de la oración y la meditación de la palabra de Dios, tu alimento y el aire que respiró tu espíritu, pide al Padre me dé la Gracia de perseverar en la Oración y gustar en la meditación de su Palabra de Vida.

Tú que te doliste tanto, por ver cuanta gente moría a tu alrededor sin conocer la Salvación que viene de nuestro Señor Jesucristo, pide al Señor me dé la Gracia del fuego apostólico, que redoble mis ánimos para no dejar de predicarlo con mi ejemplo y mi palabra.

Tú que siendo Obispo, y ya entrado en años, elegiste retornar el sendero de simple misionero, y en el encontraste la muerte en el martirio, en manos de los bárbaros que rechazaban a Cristo, pide a Dios nuestro Señor, me done la Gracia de no amar más esta vida terrena, que la Vida eterna, de no atarme a mis lugares mundanos, sino que sepa escuchar y seguir el Espíritu del Señor, allí donde este me llame.

Yo te doy gracias, Señor mío Jesucristo, porque te dignaste aceptar el sacrificio que te le hice de mi vida: ven, Señor, en socorro de tu siervo, perdónale todas sus maldades; sean purgadas con su sangre, y sírvame la muerte en lugar de penitencia. Fortifícame con tu gracia, y no permitas que me venzan los tormentos. Yo os suplico, siervos de Jesucristo, que roguéis a Dios por mí. ¡Oh qué grande es el Dios de los cristianos! No hay otro Dios, el Dios de los mártires es el único Dios verdadero Jesucristo, Hijo de Dios, salvadnos; todos creemos en Vos; te¬n misericordia de nosotros.

Dios y Señor nuestro, que con tu amor hacia los hombres quisiste que San Bonifacio anunciara a los pueblos la riqueza insondable que es Cristo, concédenos, por su intercesión, crecer en el conocimiento del misterio de la Cruz y vivir siempre según las enseñanzas del Evangelio, fructificando con toda clase de buenas obras. Por nuestro Señor Jesucristo, tu Hijo. Amén.