¿Cómo blanquear tus dientes desde la comodidad de tu casa?

La sonrisa puede ser el mejor adorno de una persona, por ende la salud de los dientes es tan importante para que luzcan blancos y hermosos; y es que, aunque existen en el mercado una gran cantidad de tratamientos, son muchas las personas que prefieren no someterse a ellos y buscar una solución más natural. 

Lograrlo no es tan complicado, solo debes tener a la mano algunos productos que serán de gran ayuda para lograr el blanqueamiento perfecto. 

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Bicarbonato de sodio y limón

Este es quizás uno de los más efectivos remedios. Debes comenzar por mezclar ¼ de taza de bicarbonato de sodio con el zumo de medio limón hasta conseguir una pasta; para aplicarlo puedes usar un algodón o un cepillo de dientes.

Déjalo en tus dientes por un minuto y enjuágalo todo; ten en cuenta que no es recomendable que la dejes por tanto tiempo, pues el ácido del limón puede ser perjudicial. Realiza este tratamiento una vez a la semana.

Aceite de coco

El aceite de coco es un producto con diversos beneficios para el rostro, el cabello e incluso el resto de la piel; pues te sorprenderá saber que tiene un uso más, y se trata del blanqueamiento de los dientes, pues ayuda a extraer todas las bacterias orales que provocan el mal aliento y las manchas. 

Solo debes tomar una cucharada de aceite de coco y proceder a hacer buches durante 20 minutos; luego enjuaga y repite este proceso todas las mañanas.

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Carbón activado 

Puede parecer muy desagradable cepillarse los dientes con una pasta negra, pero cuando seas consciente de todos los beneficios, amarás este tratamiento. El carbón activado logra absorber todo lo que queda en los dientes con bebidas como el té, el café, el vino y algunos otros, previniendo caries y promoviendo el cuidado de las encías.

Para llevar a cabo este truco casero debes mezclar el carbón activado con agua hasta que se convierta en una pasta, luego sumerge el cepillo en la mezcla y cubre cada diente de a uno. Deja que actúe por tres minutos y procede a enjuagar.

Fresas, bicarbonato y peróxido de hidrógeno

Las fresas pueden llegar a tener los mismos beneficios que el uso del limón, pues sus semillas funcionan como un exfoliante natural y como eliminadoras de bacterias no deseadas. Para ello, debes mezclar una fresa, una cucharada de bicarbonato de sodio y una gota de peróxido de hidrógeno. 

Aplica la pasta sobre tus dientes como en todos los anteriores tratamientos y después enjuaga. Te aseguramos que este sabor será mucho más agradable que el del resto, por lo cual será todo un placer realizarlo.