Mewing: El ejercicio viral en redes sociales para acomodar la mandíbula pero que puede ser dañino
El mewing consiste en colocar la lengua hacia arriba y pegarla en el paladar, pero los expertos aseguran que no es del todo bueno.

El mewing consiste en colocar la lengua hacia arriba y pegarla en el paladar, pero los expertos aseguran que no es del todo bueno.
Las redes sociales y especialmente TikTok se ha convertido en una plataforma que alberga los mejores trucos y secretos de belleza, en donde las personas no solo comparten secretos propios, sino que prueban aquellos trucos de los demás y uno que se ha viralizado en los últimos meses es el “mewing”, un ejercicio que promete ayudar a mejorar la zona de la mandíbula y eliminar la papada.
El mewing ha conquistado especialmente a los más jóvenes en redes sociales, esta técnica ha sido comprobada por varios de ellos que la han puesto a prueba consiguiendo no solo mejorar la zona de la mandíbula sin cambiar por completo su perfil, eso sí, aseguran que hace falta práctica y mucha constancia.
Según la Clínica Dental Ruiz de Gopegui de Madrid, el mewing consiste en una serie de ejercicios diseñados para promover la correcta posición de la lengua, presionándola suavemente contra la parte superior y frontal del paladar. Fue creada por el ortodoncista británico John Mew, de ahí su nombre.
“Se cree que el mewing puede influir en la forma de la mandíbula y los maxilares superiores, pero hasta el momento carece de respaldo científico que sustente estas afirmaciones”, asegura el centro especializado en estética dental.
¿Cómo funciona?, cuando la lengua está en la posición correcta, esto hace que se fortalezcan músculos faciales que estimulan el desarrollo adecuado de la mandíbula y los maxilares superiores, lo que hará resaltar dichos huesos que muchos encuentran atractivo, pues brinda armonía y simetría al rostro.
“Forzar la posición de la lengua propuesta por el mewing puede resultar contraproducente por varias razones. La lengua es un órgano muscular complejo compuesto por 17 músculos que están diseñados para diversas funciones, como el habla, la masticación y la deglución”, advierten.
El problema con el mewing es que a pesar de dar la apariencia deseada tiene riesgos que pocos conocen y es que puede haber posibles alteraciones en la articulación temporomandibular lo que causa que los dientes se muevan y no necesariamente en la posición correcta, así que tiende a torcer los dientes o sobremontarlos, de acuerdo a los expertos de la salud bucodental.
“Es importante considerar estos riesgos y consultar con un profesional de la odontología antes de adoptar cualquier técnica que afecte la posición de la lengua o la estructura facial”, recomienda la Clínica Dental Ruiz de Gopegui.