Mujer quedó con “ojos de zombie” por terrible alergia al ponerse extensiones de pestañas

“La belleza cuesta”, dicen algunas personas, pero este precio no debería pagarse con la salud, que es lo que algunas personas aún no han comprendido; esto se ve a menudo en los procedimientos de belleza, donde algunos prefieren exponer y poner en riesgo su propia vida solo por verse un poco más “lindos” o conseguir los resultados que tanto han imaginado en su cabeza.

Y es que, en la actualidad son numerosos los procesos que se llevan a cabo en el campo de la belleza, para la piel, el cabello, las pestañas, los labios, la figura, entre muchos otros; las extensiones de pestañas, por ejemplo, son uno de ellos, y aunque para muchos sea algo completamente inofensivo, una chica en Ohio, Estados Unidos, confirmó que no lo es, y que requiere de mucha precaución.

Se trata de Haley Fetzer, una joven de 17 años de edad que, queriendo lucir unas pestañas más largas, decidió recurrir a las famosas extensiones, pues tenía un evento muy importante para el que debía lucir radiante: su fiesta de graduación, tal como lo da a conocer el portal ‘The Sun’, y como muestran las fotografías de ‘Kennedy News and Media’.

No obstante, luego de ponérselas notó que sus ojos se pusieron muy rosados y, pensando que se trataba de una reacción al polen, pues vive en el campo, decidió aplicarse unas gotas blanqueadoras la noche de la importante celebración; observando que sus ojos mejoraron, 15 días después decidió regresar al centro estético para que le rellenaran nuevamente las pestañas, pero horas después empezó su tragedia.

Mientras se encontraba en una reunión de la universidad con su madre, esta última le dijo que sus ojos estaban muy rojos, y ella sabía que era así pues los sentía muy pesados, y cada vez que parpadeaba salía una sustancia viscosa de ellos; pero lo peor fue a la mañana siguiente, pues la situación parecía estar cada vez peor.

"A la mañana siguiente me desperté y ni siquiera podía abrir físicamente los ojos, ni siquiera con los dedos, nada. Se sintió como un terrible caso de conjuntivitis… Tuve que caminar a ciegas hasta el baño y poner mis ojos bajo el chorro de agua tibia y finalmente pude abrirlos, pero había tanto pegote; era como un moco muy espeso. Cuando está en cada pestaña, es casi imposible quitarlo”, dijo Haley al mismo medio.

Conforme pasaba el tiempo, sus ojos se hinchaban, tenía visión borrosa, y dolor de cabeza, por ende, fue donde su técnico de pestañas para que se las retirara; posteriormente, su médico de cabecera le recetó unas gotas para un tratamiento que duraría aproximadamente 5 semanas y, aunque después de 3 o 4 días la mucosidad comenzó a aclararse, sus ojos se veían muy rojos, por lo cual no podía salir a la calle.

“Fue vergonzoso, tuve que cancelar el trabajo… Sentí que me veía como un zombi aterrador y si salía asustaría a los niños pequeños… Probablemente tomó las cinco semanas completas antes de que mis ojos estuvieran completamente blancos nuevamente… Otra transición difícil para mí fue pasar de tener estas bonitas pestañas a cuando te las quitas, no puedes usar rímel”, agregó.

Al parecer, esta chica tuvo una grave reacción alérgica al pegamento de aquellas pestañas y es esta la razón por la que ha decidido contar su historia para crear conciencia en las mujeres, para que investiguen mejor sobre los tipos de extensiones que hay, los riesgos y que lo hagan con un profesional.

“Terminé pensando que sería una buena idea y no estaba al tanto de ninguna de las reacciones o consecuencias graves que pueden ocurrir después… Solo ten en cuenta que esto puede suceder y si tienes piel sensible, probablemente no sea la mejor idea”, concluyó.