Por: Karen Benavides • Colombia.com

¿Por qué ya no creen en el compromiso los Millennials?

La generación de jóvenes adultos tiene una idea completamente diferente del amor.

Los jóvenes no creen en el matrimonio. Foto: Shutterstock
Los jóvenes no creen en el matrimonio. Foto: Shutterstock

La generación de jóvenes adultos tiene una idea completamente diferente del amor.

El matrimonio es una de las tradiciones más antiguas en las que se sella el amor entre dos personas, sin embargo, se encuentra en peligro de extinción, pues los jóvenes ya no lo contemplan como una posibilidad, de hecho, no se encuentra dentro de ninguno de sus planes.

Algunos han preferido optar por la unión libre, o los hogares unipersonales, antes de tener que comprometerse con otra persona. Además, también están cobrando bastante fuerza las llamadas ‘relaciones abiertas’, para poder conservar la tan anhelada independencia.

Decidir no casarse parece ser la mejor elección para las nuevas generaciones, y hay muchas razones de peso que los llevan a dicha elección.

La soltería es más atractiva

Muchos encuentran el verdadero sentido de la vida en la soltería. ¿Por qué sucede esto? La idea les resulta bastante atractiva cuando se trata de ser independiente, ir a cualquier lugar que desees en el lugar que se te antoje, sin tener que preocuparte por la responsabilidad de los hijos o una pareja a la que se le debe rendir cuentas.

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No creen en el matrimonio 

No querer casarse no significa no creer en el amor, es solo que se le dan significados diferentes al romanticismo. La generación de los Millennials ya no considera que este sea un requisito indispensable para demostrar el cariño por alguien, de hecho, puede hacer que las relaciones duren menos.

No quieren adquirir más responsabilidades financieras

Casarse los obliga a encontrar una casa para vivir y ganarse la vida para los gastos del hogar; esta es una responsabilidad que los jóvenes no están dispuestos a asumir.

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Tienen problemas de confianza

Creer en otra persona no es tarea fácil para los más jóvenes, pues no todos son capaces de entregarse a otra persona como se espera, lo cual hace casi que imposible el establecer un compromiso. Esto se debe a que han tenido que vivir en una época de muchos abusos, rechazo social, discriminación, traumas, violencia y engaños.

Se enfocan más en su vida profesional

Su prioridad no es su vida amorosa. Para ellos, contraer matrimonio es crear un obstáculo para crecer a nivel profesional, lo cual no pretenden arriesgar, pues es la base de su estabilidad.