El Conjuro 4: conoce la historia real de los investigadores Ed y Lorraine Warren
El Conjuro 4 se inspira en uno de los casos de Ed y Lorraine Warren. Aquí te contamos la historia real de los investigadores paranormales.

El Conjuro 4 se inspira en uno de los casos de Ed y Lorraine Warren. Aquí te contamos la historia real de los investigadores paranormales.
Los investigadores paranormales Ed y Lorraine Warren son dos de las figuras más icónicas del misterio y el mundo paranormal. Su legado se basa en los múltiples casos de posesiones y exorcismos que marcaron su carrera e inspiraron la exitosa saga de El Conjuro, que culminará con El Conjuro 4: Últimos Ritos.
Los Warren, conocidos por enfrentarse a fenómenos inexplicables como el caso de Amityville, la muñeca Annabelle y la familia Perron, fundaron en 1952 la New England Society for Psychic Research, la sociedad de investigación psíquica más antigua de Estados Unidos.
El enfoque investigativo de la pareja en la sociedad combinaba las habilidades de Ed como demonólogo y la clarividencia de Lorraine. A lo largo de su carrera, fueron consultados por decenas de personas cuyas historias fueron bastante impactantes y aterradoras.
El estreno de la película El Conjuro 4: Últimos Ritos, ha reavivado el legado de la pareja de investigadores, pues retrata uno de los episodios más aterradores de su carrera: el caso de la familia Smurl en Pensilvania, donde fenómenos violentos y presencias oscuras pusieron a prueba toda su experiencia en la lucha contra lo sobrenatural.
La historia real detrás de El Conjuro 4
El caso de la familia Smurl gira en torno a lo ocurrido tras su mudanza a una casa dúplex de West Pittston, Pensilvania, donde experimentaron fenómenos sobrenaturales muy intensos, como sonidos inquietantes, olores fétidos, sombras oscuras flotando en el ambiente, y hasta agresiones físicas.
Ante su desesperación por los hechos, los Smurl decidieron acudir a Ed y Lorraine Warren, quienes investigaron el caso durante más de dos años en los cuales fueron testigos de acontecimientos aterradores como la aparición de rasguños en las paredes y ataques físicos.
Lorraine Warren utilizó sus dones de clarividencia para comunicarse con el más allá y llegó a la conclusión de que varias figuras demoníacas estaban ligadas a la casa. Según su versión, se trataba de cuatro entidades malignas con la capacidad de manipular energías y atormentar físicamente.
Por su parte, el demonólogo Ed Warren explicó que no se trataba de un simple fenómeno poltergeist, sino de un complejo caso de posesión demoníaca de lugar. En una oportunidad, cuando intentó expulsarlos con agua bendita percibió una caída brusca de temperatura y una masa oscura frente a él que lo dejó paralizado.
Tras años de misterio y fenómenos inexplicables, la familia Smurl logró obtener un exorcismo autorizado por la Iglesia, el cual fue realizado en 1989. Este episodio finalmente los liberó del acoso paranormal.
Luego de esto, decidieron mudarse de casa a Wilkes-Barre, donde finalmente lograron vivir en paz y alejados de los fenómenos sobrenaturales. Varias personas que posteriormente habitaron la antigua casa en West Pittston afirmaron no haber presenciado ningún tipo de actividad paranormal.