Dejar de consumir alcohol es muy beneficioso para el hígado ¡El cambio es impresionante!

Para nadie es un secreto que el consumo excesivo de alcohol puede traer graves consecuencias tanto para la salud y como para nuestro desenvolvimiento en la sociedad. De acuerdo con expertos de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) de Estados Unidos, “puede causar enfermedades crónicas y otros serios problemas”, algunos de los más comunes son: 

• Alta presión arterial, enfermedad cardíaca, accidentes cerebrovasculares, enfermedad del hígado y problemas digestivos.
• Cáncer de mama, boca, garganta, laringe, esófago, hígado, colon y recto.
• Problemas de aprendizaje y memoria, como demencia y bajo rendimiento escolar. 
• Problemas de salud mental, como depresión y ansiedad.
• Problemas familiares, problemas relacionados con el trabajo y desempleo.
• Alcoholismo.

La mejor forma de prevenir este tipo de consecuencias a corto y largo plazo es disminuir de forma drástica el consumo de bebidas alcohólicas y/o beber con moderación en situaciones sociales. Las Guías alimentarias para los estadounidenses definen beber con moderación el consumo máximo de 1 trago o menos al día en las mujeres y 2 tragos o menos al día en los hombres.

El consumo de alcohol desmedido afecta a todo el sistema, pero existe un órgano en concreto que sufre las mayores consecuencias: el hígado, que metaboliza el 90% del alcohol que consumimos.

En un artículo publicado en The Conversation, el profesor Ashwin Dhanda, especialista en hígado y docente en la Universidad de Plymouth, resalta los notables beneficios de abstenerse de consumir alcohol. 

Dhanda subraya que el hígado, el órgano interno más grande del cuerpo humano, desempeña un papel esencial en diversos procesos corporales, incluida la descomposición de toxinas como el alcohol. Aunque es el primer órgano en entrar en contacto con el alcohol ingerido y, por ende, el más susceptible a sus efectos, el especialista aclara que el consumo excesivo a largo plazo puede tener consecuencias en otros órganos como el cerebro y el corazón.

Entre las principales preocupaciones que manifiesta el experto hacia los pacientes que consumen alcohol con regularidad es que el hígado puede sufrir una gran acumulación de grasa o desarrollar enfermedades como la cirrosis, que se produce por la formación de cicatrices. Lo más preocupante del caso es que estas enfermedades no presentan síntomas hasta que el daño está avanzado.

Lo positivo, según el experto, es que el hígado es uno de los órganos que tarda menos en desintoxicarse. Dhanda indica que si el nivel de daño no es tan grave bastan dos o tres semanas de abstinencia para que el órgano se recupere, sanando y recuperando su apariencia y función original.

Además, quienes tienen inflamación hepática o cicatrices leves, pueden evidenciar beneficios mayores y en poco tiempo frente a la abstinencia. Estos pacientes pueden presentar una reducción notable de la grasa, inflamación y cicatrices hepáticas en tan solo siete días de no consumir ningún tipo de bebida alcohólica. No obstante, la curación completa y restauración del hígado requiere de meses de abstención total.