Estudio revela mayor riesgo de muerte por enfermedad cardiovascular en quienes hacen ayuno intermitente
Aunque muchos aseguran que esta práctica ayuda a perder peso de forma efectiva, tiene algunos riesgos para la salud que debes conocer.

Aunque muchos aseguran que esta práctica ayuda a perder peso de forma efectiva, tiene algunos riesgos para la salud que debes conocer.
El ayuno intermitente es una práctica que ha cobrado mucha relevancia en los últimos años, pues algunos profesionales de la salud la han comenzado a recomendar con mayor frecuencia a personas que sufren de sobrepeso u obesidad para ayudar en su proceso.
De acuerdo con expertos de la web Mayo Clinic, el ayuno intermitente consiste en evitar la ingesta de alimentos por un periodo prolongado para promover la quema de las reservas de grasa del organismo. Este se puede hacer de diferentes maneras dependiendo del enfoque:
- Ayuno de días alternos: se debe seguir una dieta normal un día y ayunar completamente o hacer una pequeña comida de menos de 500 calorías al día siguiente.
- Ayuno 5:2: consiste en seguir una dieta normal durante cinco días a la semana y ayunar dos días a la semana.
- Ayuno diario con tiempo restringido: se debe comer con normalidad, pero solo dentro de un lapso de ocho horas cada día. En este plan se recomienda saltarse el desayuno, almorzar al mediodía y cenar a las 8:00 p.m.
La misma entidad destaca que el ayuno intermitente tiene múltiples beneficios y hay estudios que respaldan que es casi tan eficaz para perder peso como una dieta baja en calorías. No obstante, se deben tener en cuenta algunos riesgos asociados.
De acuerdo con un estudio realizado recientemente en más de 20.000 personas de Estados Unidos a lo largo de ocho años, se evidenció una estrecha relación entre un mayor riesgo de muerte por enfermedades cardiovasculares y el ayuno intermitente.
De acuerdo con los investigadores, las personas que ingieren la mayoría de sus alimentos en un periodo de 8 horas tienen un 91% más probabilidades de morir de enfermedad cardiovascular, en comparación con las que comen entre 12 y 16 horas al día.
Estos resultados fueron presentados en las Sesiones Científicas 2024 sobre Estilo de Vida y Cardiometabolismo de Epidemiología y Prevención de la Asociación Americana del Corazón, llevada a cabo en Chicago en el mes de marzo.
El análisis se realizó haciendo una revisión de la información sobre los patrones dietéticos de los participantes en las Encuestas Nacionales de Examen de Salud y Nutrición (NHANES) anuales de 2003 a 2018.
Los resultados fueron sorprendente, pues las personas cuya alimentación diaria se da a lo largo de 16 horas evidenciaron un menor riesgo de mortalidad. "Nos sorprendió descubrir que los que seguían un horario de alimentación restringido a 8 horas tenían más probabilidades de morir de enfermedades cardiovasculares", destacó Víctor Wenze Zhong, autor principal del estudio y jefe de epidemiología de la Escuela de Medicina de la Universidad Jiao Tong de Shanghai, China.
Teniendo en cuenta lo anterior, el ayuno intermitente podría tener efectos positivos a corto plazo, principalmente en un proceso de pérdida de peso, pero consecuencias negativas a largo plazo.
"En general, este estudio sugiere que la restricción horaria puede tener beneficios a corto plazo, pero efectos adversos a largo plazo", concluyó Christopher D. Gardner, profesor de Medicina en la Universidad de Stanford