Por: Alexandra Méndez • Colombia.com

Estos son los riesgos a los que se enfrentan las personas que roncan

Descubre sorprendente información sobre este hábito aparentemente inofensivo.

Roncar podría ser más peligroso de lo que se cree. Foto: Shutterstock
Roncar podría ser más peligroso de lo que se cree. Foto: Shutterstock

Descubre sorprendente información sobre este hábito aparentemente inofensivo.

En la aparente tranquilidad de la noche, el molesto sonido del ronquido puede esconder algunos peligros desconocidos. Según los expertos en el tema, más allá de ser un motivo de desesperación para quienes comparten la cama con un roncador, las investigaciones médicas han destapado una serie de riesgos asociados a esta actividad nocturna aparentemente inofensiva. 

A continuación, te compartimos los posibles peligros ocultos que podrían impactar significativamente en la salud de quienes emiten sonidos respiratorios al dormir, esto te permitirá estar alerta o alertar a tus seres queridos para evitar complicaciones o enfermedades.

El manual de medicina MSD define los ronquidos como “un sonido ronco producido en la nariz y la garganta durante el sueño”, que es bastante frecuente y se va haciendo aún más frecuente a medida que se envejece.

Cifras oficiales revelan que alrededor del 57% de los hombres y el 40% de las mujeres roncan. “En muy pocos casos el ronquido es ligero, normalmente suele ser notable y a veces es lo suficientemente fuerte para ser escuchado desde otra habitación”, señalan los expertos. 

El ronquido se produce por la relajación de los tejidos blandos de la garganta al dormir, sobre todo los del velo del paladar, ya que durante el periodo de sueño disminuye la rigidez haciéndolos más propensos al aleteo. 

Por lo general, el ronquido es un síntoma de algún tipo de trastorno respiratorio del sueño. “Estos trastornos pueden ir desde el síndrome de resistencia de las vías aéreas superiores al síndrome de apnea obstructiva del sueño (SAOS). Estas enfermedades se diferencian principalmente en cuanto al grado de obstrucción de las vías respiratorias (o vías aéreas) y en la ubicación de la obstrucción”, señala el manual. 

Estos trastornos pueden afectar las actividades diarias de quienes los padecen, ya que causan somnolencia diurna, bloqueo de la respiración o sensación de asfixia y obstrucciones en la respiración en estado de reposo. Además, las personas con síndrome de apnea obstructiva del sueño presentan un mayor riesgo de sufrir hipertensión, accidentes cerebrovasculares, trastornos cardíacos y diabetes.

Entre los factores que aumentan el riesgo de sufrir ronquidos están: la edad avanzada, la obesidad, el consumo de alcohol, la congestión nasal crónica, tener una mandíbula pequeña, la menopausia el embarazo y anomalías que puedan bloquear el flujo de aire. 

Si presenta ronquidos frecuentes y adicionalmente presenta síntomas de alarma como episodios de ausencia de respiración o de asfixia durante el sueño (que puede atestiguar un compañero de cama), dolor de cabeza (cefalea) al despertar por la mañana, somnolencia durante el día, obesidad e hipertensión arterial, es necesario que consulte con un especialista para evitar problemas de salud mayores.