Por: Redacción Gastronomía • Colombia.com

3 recomendaciones para lograr hacer unos buñuelos crocantes, sin que te "exploten" en la cocina

Si quieres 'lucirte' en las Novenas, no pueden faltar los buñuelos caseros y este es el truco para que "no exploten". 

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Los buñuelos tienen su "maña" y estos trucos te servirán para lograrlo. Foto: Shutterstock
Los buñuelos tienen su "maña" y estos trucos te servirán para lograrlo. Foto: Shutterstock

Si quieres 'lucirte' en las Novenas, no pueden faltar los buñuelos caseros y este es el truco para que "no exploten". 

Los buñuelos son los 'acompañantes' ideales de la natilla, uno de los postres más tradicionales para compartir en Navidad. Así podrás hacerlos crocantes, deliciosos y sin que te "exploten", estas son las 3 recomendaciones. 

Aceite 'limpio' y caliente 

El mejor consejo para lograr unos buñuelos bien crujientes, es que el aceite debe tener una temperatura caliente, unificada. Debe estar en un caldero, con suficiente aceite, fresco, limpio, no haber fritado patacones ni papas en el, para que no queden impregnados de otros sabores. 

La forma de probarlo, es que se haga una 'bolita' de masa, si sube de inmediato, con burbujas alrededor, está listo. Si se queda abajo, el aceite aún está frío. La idea es sacar esta 'bolita' de prueba, y mantenerlo a una temperatura media. 

El tamaño 'perfecto'

La cocción es más uniforme, cuando los buñuelos, son en forma de 'bolitas' que no superen el tamaño similar al de un limón. Con ese tamaño, se tiene una porción adecuada, cocción perfecta y se doran facilmente, en el sartén con el aceite caliente. 

El amasado también es importante, para que queden con buen sabor por dentro. La idea es 'golpear' de forma vigorosa contra la mesa, para que la masa quede uniforme y bien oxigenada.

El queso "ideal"

El truco para que exploten, es la cantidad que se le pone de queso y además el tipo. En Colombia, la mejor opción para usar en esta receta tradicional, es el queso costeño, preferiblemente que esté rallado y duro. Así se podrá manipular en la masa, incorporándose de forma perfecta, en el amasado. Si se pasa de queso, es probable que la reacción química con el aceite sea de "explotar". 

Así que la receta es: dos tazas de maicena, unos 250 gramos. Dos tazas de queso costeño rallado, bajo en sal, 4 cucharadas de azúcar blanca refinada y media cucharadita de polvo para hornear. 

El tiempo de cocción, puede no ser una ciencia. Se puede demorar hasta 10 minuto, debe ser a fuego medio, para que no queden crudos por dentro y muy tostados por fuera. Cuando queden 'dorados' es tiempo de extenderlos sobre un trozo de papel absorbente, para que se seque el exceso de aceite.