Diálogos de Paz

Paz: EE.UU. reconoce la fase critica de los diálogos de paz en Colombia

Estados Unidos reconoció que el proceso de paz en Colombia se encuentra en una etapa "crítica, quizá la más difícil hasta ahora", pero instó al Congreso estadounidense a mantener su apoyo a las negociaciones y a avanzar para lograr un acuerdo.

Enviado especial de Estados Unidos para el proceso de paz en Colombia, Bernie Aronson. Foto: EFE
Enviado especial de Estados Unidos para el proceso de paz en Colombia, Bernie Aronson. Foto: EFE

Estados Unidos reconoció que el proceso de paz en Colombia se encuentra en una etapa "crítica, quizá la más difícil hasta ahora", pero instó al Congreso estadounidense a mantener su apoyo a las negociaciones y a avanzar para lograr un acuerdo.

Dos altos funcionarios del Departamento de Estado analizaron ante el Congreso el tenso momento que atraviesa el proceso de paz entre el Gobierno colombiano y las Farc, tras el recrudecimiento del conflicto en las últimas semanas y la fuerte ofensiva del grupo rebelde.

"Las conversaciones están en una fase crítica, quizá la más difícil hasta ahora", dijo el subsecretario de Estado de EE.UU. para Suramérica y Cuba, Alex Lee, durante una audiencia sobre Colombia en un subcomité de la Cámara de Representantes estadounidense.

"Condenamos el terrorismo de las Farc y estamos de acuerdo con el presidente, Juan Manuel Santos, en que estas acciones solo traen la destrucción y el sufrimiento al pueblo colombiano y son completamente incompatibles con la paz", añadió Lee.

Por su parte, el enviado especial de EE.UU. para el proceso de paz en Colombia, Bernard Aronson, admitió que la escalada terrorista que iniciaron hace un mes las Farc contra las infraestructuras petroleras y energéticas, con ataques que han matado a policías y militares, es "una mala señal, una señal preocupante".

"Es un síntoma de que no estamos aún al final del proceso" de negociación, opinó Aronson.

El grupo insurgente suspendió a finales de mayo el alto el fuego unilateral e indefinido que había iniciado cinco meses antes, después de que 27 guerrilleros murieran en un bombardeo de la Fuerza Aérea en la región del Cauca, una acción que a su vez respondió a un ataque insurgente que mató a 11 militares en la misma zona en abril.

Aronson aseguró que el alto el fuego unilateral siempre fue "inherentemente inestable", ya que no había una supervisión externa.

"Hay muchas señales de progreso en las conversaciones de paz, y también hay una escalada de violencia que pone en duda el compromiso de las Farc " con un acuerdo, resumió el enviado de paz.

Aronson se convirtió en febrero en el enviado especial de EE.UU. para el proceso de paz, un puesto hasta entonces inexistente que el presidente estadounidense, Barack Obama, creó a petición de Santos.

El diplomático, que hasta ahora había dado pocos detalles sobre su rol, especificó hoy que no es un "mediador clásico" entre las partes, sino que su actividad va siempre "en apoyo de la agenda del Gobierno colombiano".

"Estoy disponible para el presidente Santos y sus asesores para compartir ideas que puedan ser relevantes, y participo en sesiones únicamente con las Farc y en otras únicamente con el Gobierno, porque el Gobierno cree que sería útil educar a las Farc en la política de EE.UU. y su posible apoyo a un acuerdo de paz", agregó.

Aronson garantizó, además, que en las negociaciones en La Habana "no está sobre la mesa" la posibilidad de que Estados Unidos libere temporal o permanentemente al líder de las Farc "Simón Trinidad". EFE