Ausencias en Cumbre de las Américas son analizadas como derrota geopolítica para EE.UU.

Joe Biden, presidente de los Estados Unidos, no es un mandatario que cale hondo entre muchos de sus compatriotas y en América Latina es considerado muy diferente a los que gobernaron su nación, tradicionalmente rodeados de una imagen autoritaria y radical.

Muchos estadounidenses consideran que Joe Biden es un blando y no representa la figura fuerte y aguerrida de  anteriores mandatarios de la otrora, nación más poderosa del mundo.

La reciente Cumbre de las Américas tuvo como sede a los Estados Unidos, una oportunidad que muchos analistas consideran serviría como una oportunidad para que la gran nación de Norteamérica recuperara el terreno hegemónico perdido.

Estados Unidos decidió excluir del grupo de invitados a Cuba, Venezuela y Nicaragua, pese a que gobiernos como el de México solicitaron que todos los países del continente hicieran parte del encuentro, pero a pesar de ello, la cumbre llegó a su fin este viernes 10 de junio, luego de haberse iniciado el lunes 6.

Los países excluidos tienen gobiernos de carácter socialista, Cuba desde 1959, Nicaragua, presidida por el exlíder guerrillero Daniel Ortega y Venezuela, que, con la llegada al poder de Hugo Chávez en 1999, ha sido objeto de sanciones y bloqueos económicos que han producido una crisis social desde hace una década.

Ante la negativa de los Estados Unidos de reconsiderar su posición frente a las 3 naciones excluidas, el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, AMLO,  decidió no asistir al encuentro, lo cual representa un duro revés para el gobierno estadounidense, teniendo en cuenta la importancia geopolítica de la nación mexicana.

El internacionalista ruso Dmitri Razumovski, director del Instituto de América Latina de la Academia de Ciencias de Rusia, dijo a Sputnik Mundo que las ausencias en la Cumbre de las Américas representan un fracaso geopolítico para Joe Biden.

Miguel Díaz-Canel, Daniel Ortega y Nicolás Maduro son los mandatarios que no recibieron invitación, por lo tanto, Andrés Manuel López Obrador, decidió no asistir.

“Es imposible que EE.UU. se tome como algo normal en número récord de presidentes que estuvieron ausentes (…) Probablemente sea una derrota geopolítica regional de Biden”, indió Razumovski.

El internacionalista añadió que las relaciones de Estados Unidos con la región se caracterizan por su “ideologización”, es decir los valores de la democracia -que según el criterio de Washington- deben ser una prioridad.

Ramuzovki indico que, de acuerdo con esta ideología propia de los Estados Unidos, Cuba, Nicaragua y Venezuela no fueron invitados.

Los Estados Unidos ya no son la primera potencia del mundo, el nuevo orden mundial dejó de mantener divisiones entre occidente y oriente, y actualmente las grandes potencias son la presidida Joe Biden, la Federación de Rusia y China, el gigante asiático.