Por: Juan Carlos García Sierra • Colombia.com

Jair Bolsonaro rechazó los actos vandálicos en Brasilia cometidos por sus seguidores

Desde los Estados Unidos, el exmandatario afirmó que las manifestaciones vandálicas y las tomas a edificios gubernamentales este domingo no hacen parte de la democracia.

Jair Bolsonaro asegura que no dirigió las manifestaciones de sus seguidores en Brasilia. Foto: Youtube
Jair Bolsonaro asegura que no dirigió las manifestaciones de sus seguidores en Brasilia. Foto: Youtube

Desde los Estados Unidos, el exmandatario afirmó que las manifestaciones vandálicas y las tomas a edificios gubernamentales este domingo no hacen parte de la democracia.

Luego de la toma por parte de seguidores de Jair Bolsonaro a diversos edificios gubernamentales en Brasilia, el exmandatario rechazó estos actos desde los Estados Unidos, país en el que se encuentra, según informó la agencia EFE.

Luego de que durante gran parte del día centenares de simpatizantes del exmilitar se enfrentaran a las fuerzas de Policía, cerca de 300 personas fueron detenidas por asaltar las sedes de los tres poderes de Brasil.

El excapitán del Ejército de Brasil y presidente de la nación entre 1018 y 2022 envió un mensaje en el que afirma que las tomas de edificios gubernamentales no hacen parte de la democracia, recordando situaciones similares realizadas por la izquierda en los años 2013 y 2017.

“Las manifestaciones pacíficas, dentro de ley, son parte de la democracia. Sin embargo, el vandalismo y las invasiones de edificios como las ocurridas hoy, así como las practicadas por la izquierda en 2013 y 2017, escapan a la regla”, manifestó Jair Bolsonaro en redes sociales.

Las manifestaciones de simpatizantes de Jair Bolsonaro que fueron repelidas por las fuerzas del orden, son achacadas al exmandatario, no obstante, el líder de derecha indicó que no tiene que ver con ellas.

Bolsonaro ha criticado fuertemente el regreso de Luiz Inácio Lula da Silva al poder en Brasil, quien obtuvo el 51% de los votos en los comicios presidenciales de octubre, en medio de un ambiente caldeado y marcado por la polarización.

Jair Bolsonaro viajó a los Estados Unidos en los últimos días del 2022, días antes de la posesión de Lula da Silva como mandatario de los brasileros, siendo en único mandatario que tendrá una tercera administración, y mientras se refugió en Orlando en Florida, sus simpatizantes se concentraban en diferentes ciudades para pedir la salida de Lula da Silva de la Presidencia de la nación.

Los manifestantes en Brasilia, quienes se contaban por miles, destrozaron las instalaciones del Congreso y pedían frente al Cuartel general del Ejército que las fuerzas militares se sublevaran para derrocar al exlíder sindical y presidente de la República Federativa de Brasil de 77 años.

Luiz Inácio Lula da Silva calificó los catos como 'obras fascistas' y aseguró que irá detrás de quienes promovieron los asaltos de la tarde del domingo, así como enjuiciar a las personas detenidas y con comprobada participación en los desmanes en Brasilia.

El mandatario brasilero decretó hasta el 31 de enero la intervención federal del área de seguridad de la capital de la nación, lo que supone que la Policía estará bajo las órdenes del Gobierno.